La Junta se compromete a reparar el muro que sujeta las casas de Las 800
La obra de la pared, que lleva meses apuntalada, comenzará en junio, según la Administración regional
Cuatro vallas azules es lo primero que ve Bonifacio Rodríguez desde hace 18 meses cuando sale a la puerta de su casa, ubicada en el ... número 37 de la calle Tajo. Es en las traseras del barrio de Santa Engracia, conocido también como las 800.
Bajo las vallas, varios tableros apuntalan una pared que se derrumbó el 14 de diciembre del año 2022, y que desde entonces tiene preocupados a sus vecinos.
«Es una vergüenza que yo pague mis impuestos como el resto de ciudadanos, como lo hacen en otros barrios, y que esto esté así hace más de un año. La única solución que nos han dado ha sido apuntalar la pared para que no se derrumbe más», cuenta Rodríguez.
Noticia relacionada
Un barrio en el que ninguna de sus calles en accesible
Fue en el mes de octubre cuando se apuntaló la pared, una actuación de la que se hizo cargo la Junta, pese a que no es a quien le corresponde esta tarea. «No nos corresponde llevar a cabo esta actuación. Existe una copropiedad con los propietarios de viviendas sobre determinados viales y zonas de uso público», cuentan a HOY desde la Administración regional.
Con el objetivo de facilitar la gestión y por seguridad de los ciudadanos, la obra que necesita este muro correrá a cargo de la Junta, que tiene previsto comenzar con las obras el próximo mes.
«La consejería no ha tenido hasta la semana pasada el visto bueno del Ayuntamiento para llevar a cabo la actuación, por lo que se ejecutará probablemente durante junio», explica.
Una obra que llega 18 meses después de que Bonifacio, vecino del barrio desde hace 36 años, fuera testigo de cómo se cayó el muro que cierra el acerado de su calle. «Justo acababa de entrar en casa. Había estado apoyado en la barandilla que hay sobre el muro, paso ahí mucho tiempo, y me asustó el ruido tan grande. El muro se había desplomado y por poco no me caí con él», recuerda.
Los vecinos creen que este derrumbe de tierra, que sí afectó a una familia que pasaba con el coche, se debe a la falta de mantenimiento que hay en el barrio.
«La prueba la tienes en que esto se cayó en diciembre y hasta octubre del año siguiente no vinieron los técnicos a retirarnos los escombros que han estado tapando parte del acerado», señala.
Responsabilidad
Con la retirada de los ripios los vecinos esperaban la reparación del muro, pero los técnicos regionales tan solo apuntalaron la pared, con el fin de evitar nuevos derrumbes. «Lo que han hecho ha sido poner una placa metálica, unas vallas y sujetar el muro. Esto no es lo que nosotros queremos, ni lo que nos dijeron que iban a hacer», subraya la presidenta de la asociación de vecinos, Paqui Yáñez, que pide a las instituciones que se responsabilicen de la obra.
Una obra que se ha retrasado debido a la falta de responsabilidad por parte de las instituciones. «El Ayuntamiento decía que esto pertenecía a la Junta y esta dijo en octubre que este asunto lo abordarían entre la consejería y el Consistorio. Estamos expuestos a una desgracia», dice Yáñez.
La lluvia es otra de las preocupaciones que han tenido los residentes de la calle Tajo esta primavera, pues precisamente esta fue la causa del derrumbe. «Fue un mes en el que llovió muy fuerte, de hecho hubo inundaciones en Valdebótoa y otras pedanías de Badajoz», recuerda Yáñez, que señala que la ayuda no tardó en llegar a estos lugares. «Hemos pedido ya de todas las maneras que nos den una solución. Esta primavera ha llovido mucho y en una de estas se cae todo, llevándose las viviendas por delante».
Una petición que será resuelta 18 meses después, y que permitirá que la tranquilidad vuelva a casa de los vecino que esperan que esta obra sea una realidad y que el hormigón sostenga pronto el muro de sus viviendas.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión