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María Jesús Palacios durante su visita a Bruselas. :: e. f. v.
Extremadura utiliza el camalote para alertar en Bruselas de las «bioinvasiones»

Extremadura utiliza el camalote para alertar en Bruselas de las «bioinvasiones»

María Jesús Palacios, jefa de sección de Vida Silvestre, advierte del riesgo que entrañan para la salud el jacinto de agua y las tortugas de Florida

EVARISTO FDEZ. DE VEGA

BRUSELAS (BÉLGICA).

Lunes, 16 de octubre 2017, 07:30

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Evitar que el problema del camalote se extienda a otras cuencas fluviales europeas. Ése es el objetivo con el que ha viajado a Bruselas esta semana María Jesús Palacios González, jefa de sección de Vida Silvestre de la Dirección General de Medio Ambiente de la Junta de Extremadura.

La experta extremeña ha participado como ponente en uno de los seminarios encuadrados en la Semana Europea de las Regiones, un encuentro en el que se han celebrado 130 seminarios de las más diversas temáticas con la participación de 5.000 expertos.

El foro en el que participó Palacios estaba centrado en las «bioinvasiones» y fue aprovechado para alertar del grave quebranto económico que supone el control y la lucha contra las especies invasoras. «Es el segundo problema de biodiversidad que tenemos en el planeta y genera a Europa unos costes económicos de 139 millones de euros al año».

Palacios recordó que las primeras «bioinvasiones» que sufrió Europa llegaron en el siglo VIII con la rata parda, que diezmó la población europea en un tercio. «El problema de salud que tenemos con las especies invasoras es tremendo -explicó-. El mosquito tigre, por ejemplo, es una especie invasora que está dando problemas en España, en Italia y en el sur de Francia, mientras que el dengue ha aparecido de repente en el noreste de la Península Ibérica y en Francia».

Como especie invasora que preocupa en Extremadura, María Jesús Palacios habló de la tortuga de Florida, que puede causar salmonelosis tanto en la naturaleza como en los humanos. «Estamos trabajando con todos los centros de salud porque hay muchas especies que se tienen como mascotas sin que las personas que las poseen sean conscientes de los problemas de salud que pueden generar».

También puede suponer un peligro el camalote, una planta acuática que ha encontrado en el río Guadiana un medio idóneo para reproducirse. «En este caso las repercusiones no sólo son económicas sino también para la salud porque estas especies invasoras acuáticas acumulan muchos metales y si esos metales llegan a un embalse de abastecimiento pueden acabar en nuestro cuerpo, lo que podría provocar que el agua no sea apta para el consumo humano».

La jefa de sección de la Dirección General de Medio Ambiente aprovechó su presencia en la capital de Europa para alertar del riesgo que supondría la extensión de esta planta a otros cauces fluviales europeos. «Para que se desarrolle el camalote tienen que darse unas condiciones muy concretas de temperatura y humedad, además de existir un aporte de nutrientes similar al que existe en las Vegas del Guadiana, donde hay mucho nitrógeno y fosfato procedente de los cultivos agrícolas de la zona».

Igualmente habló de otra especie vegetal que preocupa en la Unión Europea y que ya ha sido detectada en el entorno del Parque Nacional de Monfragüe: myriophyllum aquaticum. «Como Dirección General de Medio Ambiente acabamos de hacer una actuación para la eliminación de una especie que, hasta el momento, está en un punto muy localizado. Pero tenemos que seguir trabajando y erradicarla en su totalidad en estos próximos meses».

La jefa de sección de Vida Silvestre destacó el hecho de que Extremadura haya recibido fondos para combatir las especies invasoras desde el año 2010. Ese dinero es enviado desde la Unión Europea a través de proyectos en los que participan también el Alentejo y la región Centro de Portugal.

Esa lucha común permite atacar el problema a ambos lados de la frontera, un esfuerzo transfronterizo que resulta necesario porque, como quedó claro en el foro de Bruselas, «la naturaleza no entiende de fronteras».

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