Badajoz

El derribo del edificio junto al Palacio de Godoy obliga a cerrar la Escuela de Idiomas el resto de la semana

Las obras para llevar a cabo el derribo del edificio situado junto al Palacio de Godoy se van a extender más de lo previsto, lo que obligará a que la Escuela Oficial de Idiomas y la Escuela de Artes y Oficios 'Adelardo Covarsí' permanezcan cerradas el resto de la semana. Es la indicación que ha emitido el Ayuntamiento de Badajoz a ambas instituciones como medida preventiva. Se trata de evitar el tránsito de personas por la zona lo máximo posible con el objetivo de garantizar la seguridad de los usuarios. De hecho, el acceso a la Escuela de Idiomas está vallado para que nadie pueda entrar al edificio.

En un primer momento, ambas instituciones suspendieron sus clases este miércoles, día en el que comenzaban los trabajos para demoler el inmueble anexo al Palacio de Godoy. Esta actuación se enmarca dentro del proyecto que se está realizando para acondicionar el entorno de este edificio histórico. Cabe recordar que el palacio es del siglo XVII, pero a lo largo de décadas se han ido añadiendo estructuras que tapaban la forma original.

Sin embargo, estos trabajos van a durar más de lo programado inicialmente, por lo que ambos centros permanecerán cerrados también este jueves y el viernes. Por tanto, tampoco impartirán clases presenciales estas jornadas.

Desde el equipo directivo de la Escuela de Idiomas lamentan que se les haya avisado del cierre forzoso del centro con tan solo unas horas de antelación. En concreto, el martes por la tarde se les comunicó que la escuela no podía abrir el miércoles. Sobre el cierre de este jueves y viernes ha ocurrido algo similar, ya que al centro se le ha informado oficialmente de la necesidad del cierre en la tarde de este miércoles. «Disponemos de muy poco margen para poder avisar a los alumnos. Se podía haber programado mejor teniendo en cuenta que estas obras estaban proyectadas desde hace mucho tiempo», explica la directora de la Escuela de Idiomas, Isabel Mena.

Por otro lado, la Consejería de Educación ha requerido que se impartan clases online para los alumnos de la sede central afectada por el cierre. En este sentido, desde el equipo directivo vuelven a recalcar el poco tiempo que se les ha dado para que los profesores pudieran preparar esas clases a distancia. «Hay que informar también a los alumnos del cambio de la modalidad de las clases sin apenas antelación teniendo en cuenta, además, que a lo mejor hay quien no dispone de recursos para tomar esas clases online y sin darles tiempo para que puedan hacerse con los medios necesarios», indica Mena.

A pesar de todos los contratiempos, la directora de la Escuela de Idiomas manifiesta que los profesores se adaptarán a la situación y se pondrán en contacto con los alumnos para comunicarles todos estos cambios. Además, ha señalado que los grupos que acuden al instituto Zurbarán no se verán afectados, por lo que allí se impartirán las clases el resto de la semana sin alteración.

Si los trabajos se desarrollan según lo previsto, la actividad de ambas escuelas volverá a la normalidad el próximo lunes y retomarán sus clases.

Tanto la Escuela Oficial de Idiomas como la Escuela de Artes y Oficios Adelardo Covarsí llevan años reclamando su traslado a otra ubicación con mejores condiciones.

Está previsto que el centro de Artes se instale en el Convento de San Agustín, situado junto a la iglesia del mismo nombre. Este espacio está siendo actualmente rehabilitado y la idia es que el cambio se lleve a cabo cuando el inmueble esté preparado.

Sin embargo, todo apunta a que a la Escuela de Idiomas le tocará esperar algo más. Aunque en un principio se apuntó al Hospital Provincial como nueva localización, de momento esta opción continúa en el aire y no hay una ubicación definitiva para su futuro traslado.

La situación originada tanto por el retraso en la búsqueda de una solución para la Escuela de Idiomas como las molestias de las obras actuales está generando gran malestar entre los alumnos, que llevan sufriendo las malas condiciones del inmueble desde hace años. El centro carece de aulas para personas con movilidad reducida y se ve obligada a impartir algunas clases en el instituto Zurbarán para atender a los alumnos debido a la falta de espacio.

Esto ha hecho que los estudiantes muestren en numerosas ocasiones su descontento con estas condiciones. De hecho, tras conocer el cierre de la escuela estos días, han instalado en una ventana carteles expresando sus quejas en diferentes idiomas.

Las obras para reformar el entorno del Palacio de Godoy de Badajoz arrancaron a finales de abril de este año. Tienen una duración estimada de ocho meses, por lo que la previsión es que el proyecto esté concluido esta Navidad.

El objetivo de esta remodelación es habilitar un aparcamiento con 50 plazas gratuitas. Además habrá una zona ajardinada, una rampa para acceder al Casco Antiguo desde este punto y paradas de autobús y bicicletas.

Estos trabajos forman parte de la segunda fase de la rehabilitación de la zona. La primera empezó en noviembre de 2021 y acabó en marzo de 2002. Se centró en la demolición del muro perimetral del palacio y la tala de los árboles que había delante despejando la visión de edificio histórico.

Esta segunda fase tiene un coste de 600.000 euros de fondos europeos Edusi.

El Palacio de Godoy se construyó en el siglo XVII. Era de una familia destacada de la ciudad, los Caldera. Luego pasó al Ayuntamiento que lo usó como hospicio, pero quedó vacío tras sufrir daños por una crecida del río que también derribó parte del puente de Palmas (1796).

Fue reconstruido y, en una visita de Manuel Godoy a la ciudad, el entonces Príncipe de la Paz le pidió al Ayuntamiento terrenos para hacerse una casa en su ciudad natal. Los responsables municipales decidieron regalarle el palacio. Sin embargo el político fue destituido y nunca llegó a pisarlo. Solo se quedó con su nombre.

En cuanto al uso, el palacio alberga la Escuela de Artes y Oficios y la Escuela de Idiomas. La primera se trasladará al Convento de San Agustín, que está en obras, la segunda también espera traslado, al Hospital Provincial, pero sin fecha. Cuando se quede vacío, el Ayuntamiento aún no ha determinado qué hacer con este monumento.