Roberto Ledesma Hernández

Director territorial de Ibercaja en Extremadura

«El Edificio Ibercaja debe ser un foro de encuentro para Badajoz»

–¿Por qué una delegación propia para Extremadura?

–Antes, la territorial agrupaba Andalucía, menos Almería, Canarias y Extremadura. La intención ahora es centrarnos exclusivamente en Extremadura con el objetivo de, a medio-largo plazo, ser líderes en la región.

–¿Qué peso tiene Ibercaja en Extremadura y dónde está el liderazgo regional?

–No tenemos datos de 2024, pero estaremos sobre el 11% de cuota regional. Tenemos más peso en Badajoz, donde nos acercamos al 20%, que en Cáceres, donde no llegamos al 5%. En la región estaremos en torno a 4.500 millones de euros de actividad y el liderazgo regional estará entre los 5.500 o 6.000 millones de euros, porque las nueve entidades de la región estamos todas entre un 8% y un 12% de cuota de mercado.

–¿Qué significa Extremadura en el global de Ibercaja?

–Estamos entre el 4% y el 5% del global del banco. Extremadura es un 2,5% del PIB y el sistema bancario extremeño representa el 3% del nacional. Si extrapolamos esos datos, la territorial extremeña está respecto a Ibercaja un poco por encima de lo que representa Extremadura frente a España. Es verdad que Ibercaja tiene una serie de territorios de origen en los que quiere poner un peso especial y uno de ellos es Extremadura.

–¿Cómo va a afectar la nueva territorial en los clientes?

–Si ponemos el foco en lo que necesita Extremadura seremos capaces de hacer mejor las cosas. Por ejemplo, hemos hecho un análisis de todas las comarcas para garantizar que tienen oficinas con dotación de personal suficiente y cualificado en los principales sectores de actividad. No es otra cosa que estar más cerca de los extremeños. Habitualmente pensamos en que no falten servicios en las grandes poblaciones, pero la idea es garantizar todos los servicios en todas las comarcas.

–¿Eso significa más oficinas o van a seguir adelgazando su red?

–No creo que incrementar el número de oficinas vaya a ayudar a la población. El Banco de España contabiliza 84 oficinas de Ibercaja en Extremadura. Es cierto que hace unos años se hizo un ajuste que era necesario, pero es un ajuste relativo porque hemos reducido las fichas bancarias y no la presencia en los sitios. Seguimos teniendo los locales en las mismas poblaciones y hacemos una eficiente asignación de horas o días de apertura. Ahora nuestro objetivo es mantenernos como estamos y seguir creciendo con las figuras deslocalizadas y la digitalización que nos permiten atender donde no tenemos oficinas.

–¿Siguen notando que los clientes demandan presencialidad?

–Absolutamente y nuestra función fundamental es la generación de confianza; eso solo se consigue con la interacción. Otra cosa es que esa interacción pueda ser virtual. Además, nos preocupamos de tener las oficinas suficientemente dotadas para cubrir las necesidades de los clientes y que estos puedan tener una atención personalizada en momentos que para ellos son claves, como la firma de hipotecas o las herencias.

–¿A qué responde el cambio de nombre del Edificio Siglo XXI?

–La idea nace de la nueva territorial extremeña. La denominación de edificio Ibercaja busca lanzar el mensaje de que Ibercaja quiere ser importante en la sociedad extremeña. Aunque no nos importa que la gente lo llame Siglo XXI o Torre Caja Badajoz. No se trata de tapar nada del pasado. Nuestro reto es convertir el edificio en un foro de encuentro para la sociedad. En 2024 ya hemos hecho cerca de medio centenar de eventos, además de ser un edificio de oficinas que tiene sus inquilinos.

–¿Qué ocupación tiene el edificio?

–Afortunadamente, tenemos lista de espera. Desde 2024 está completamente lleno. Ha costado varios años llegar a esta situación, pero actualmente hay más de 600 personas trabajando. Es un elemento de orgullo para nosotros, también por el nivel de las empresas que hay alojadas.