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Los artesanos proponen ampliar el mercado navideño de Badajoz a otras plazas

Las ventas han ido bien en la séptima edición del rastrillo que se celebra en San Francisco, especialmente de los productos hechos a mano

NATALIA REIGADAS

BADAJOZ.

Viernes, 4 de enero 2019, 07:56

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Dolores Benítez prácticamente ha agotado sus productos. Hace muñecos de nieve y otras figuras navideñas, y la primera semana del mercado, volaron. Ha ido reponiendo y vendiendo complementos, por lo que su primer año en San Francisco se ha cerrado como un gran éxito. Como ella, muchos de los comerciantes se muestran muy contentos con esta edición de la feria navideña que termina mañana. Ha cumplido siete años con buen nivel e incluso proponen que se amplíe a otras plazas.

«Lleva unos años que ha ido remontando y es una muy buena salida para los artesanos de la ciudad. Hay gente que quiere tener puesto y se queda fuera. En San Francisco es difícil instalar más casetas, pero yo creo que se podría ampliar, por ejemplo, hacia San Atón», propone Blanca Ambel, una de las artesanas que ha participado este año. Está de acuerdo con ella Manuela Ortiz, una clienta que ayer apuraba sus compras. «Está muy bonito. A mi me gusta venir y creo que se podría hacer más grande. Hay ciudades que tienen mercados muy amplios».

La ampliación, demandada por algunos comerciantes y compradores, no sería la primera. Esta edición ya ha supuesto un paso adelante para el mercado. Ha contado con 52 puestos, cinco más que el año anterior. Se han instalado las casetas nuevas, en estilo rústico, en el lateral de San Francisco más cercano a Correos.

Para ocupar esos 52 puestos se han presentado 87 interesados. El Ayuntamiento da prioridad a los productos relacionados con la Navidad. También se premia la variedad, es decir, que sean ofertas distintas y participan asociaciones que recaudan fondos para causas solidarias como el Colegio Nuestra Señora de la Luz o Cruz Roja, entre otras. Otro criterio que el Consistorio tiene en cuenta es que los artesanos ya hayan participado. Tienen prioridad los que repiten, por lo que lograr un puesto nuevo no es fácil. En este caso se han quedado fuera 35 solicitantes a los que ayudaría la posible ampliación de la iniciativa.

Cada vez mejor

Los productos hechos a mano han sido los que más éxito han tenido. Los artesanos, además, señalan que el mercado ha evolucionado mucho desde sus primeras ediciones en San Atón. Así lo confirma Marta Portillo, que no ha faltado ningún año con sus productos de cosmética natural. «Cada vez mejor. Todos los años tenemos éxito, pero este ha ido aún más positivo en ventas»

Portillo confirma que este rastrillo es una oportunidad para los que crean sus propios productos. «Es una ayuda bastante grande y además te das a conocer. La gente ya viene a buscar tu caseta, de otros años que te conoce».

María Morcillo se ha estrenado en este edición con un puesto de colgantes, pendientes y otros complementos creados por ella, con plumas naturales y cuero entre otros elementos. También está encantada. «A todo el mundo le ha gustado mi puesto. Ha sido estupendo. Estoy feliz», resumía ayer.

A diferencia de otros años, en los que las lluvias han complicado las ventas, este año el tiempo también ha ayudado. Otro elemento favorable, según destacan los comerciantes, son los eventos. Los conciertos y las actuaciones que tienen lugar estos días en San Francisco y en el López de Ayala, atraen mucho público a la zona. Eso sí, la asistencia es mucho menor los días de diario.

Esta cita navideña también supone una buena plataforma para las causas solidarias. Así lo explica María José Peña, voluntaria de Ícaro, la Fundación Oncológica Infantil Extremeña que nació para ayudar a las familias cuyos hijos sufren esta enfermedad. Esta entidad ha acudido al mercado varios años, en colaboración con el Economato Social, para recaudar fondos y Peña señala que es un buen recurso.

Este año admite, eso sí, que sus ventas no han sido tan buenas como otras ediciones. A pesar de todo, lo consideran una buena oportunidad para las asociaciones sin ánimo de lucro. «Los regalos solidarios son muy importantes porque muchas veces nos centramos mucho en el materialismo y siempre hay hueco para estas causas», concluye Bárbara navarro, otra voluntaria.

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