El abogado de uno de los acusados por la violación en manada en Badajoz defiende su inocencia
La supuesta agresión sexual se cometió el 26 de septiembre de 2016 en la rampa exterior de un garaje de la calle Castillo de Almorchón
Fernando Cumbres, el abogado que representa a uno de los tres acusados de agredir sexualmente a una joven en la Urbanización Guadiana de Badajoz, defendió ... ayer la inocencia de su representado y recordó que ninguno de los tres procesados, para los que la Fiscalía pide más de 40 años de cárcel, ha estado en prisión provisional por estos hechos. «La Fiscalía lo ha pedido en dos ocasiones, pero ni mi defendido ni los otros dos acusados han pisado la cárcel y tampoco se ha dictado una orden de alejamiento, eso es muy significativo», explica.
Cumbres cree que los hechos no ocurrieron como aparecen en el relato realizado por la Fiscalía y pide que se respete la presunción de inocencia de los tres acusados hasta que termine el juicio y haya sentencia.
En estos momentos, los hechos ya han sido calificados de forma provisional por el Ministerio Fiscal y ahora serán los abogados de las defensas los que fijen sus posturas. Con posterioridad será señalado el juicio, que deberá celebrarse en la Audiencia Provincial de Badajoz.
Cumbres representa al chico al que, según las pruebas de ADN, pertenece el semen que fue localizado en el interior de un preservativo que, en su parte exterior, tenía restos de ADN de la joven.
Según se recoge en el escrito de calificación de la Fiscalía, la supuesta agresión sexual se cometió el 26 de septiembre de 2016 en la rampa exterior de un garaje de la calle Castillo de Almorchón. Hasta allí habría sido llevada la joven «a empujones» por tres jóvenes de entre 25 y 30 años –ella era algo mayor– que la despojaron de su ropa, la agarraron del cuello y los brazos, y le doblaron la espalda por la fuerza para obligarles a que les practicara felaciones a los tres.
Aviso a la policía
Eran las 5.20 de la madrugada y los vecinos de la zona avisaron a la policía, que al llegar halló a la víctima desnuda, de rodillas y apoyada contra la puerta del garaje mientras sus agresores se encontraban con los pantalones desabrochados y al menos dos de ellos tenían la camisa abierta.
Los hechos ocurrieron a finales de 2016 pero ha sido ahora cuando la Fiscalía ha elevado su calificación provisional. El retraso ha estado provocado, entre otras razones, por las peticiones que han realizado las defensas, que en al menos tres ocasiones han solicitado informes que consideraban relevantes para la investigación del caso.
Además, uno de los letrados renunció a representar a su defendido a comienzos del año pasado, coincidiendo con el inicio de la pandemia, y tardó en ser nombrado un nuevo letrado, prolongándose de ese modo la investigación de un caso que ahora sí parece que será juzgado en un plazo no demasiado largo.
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