Arrancan las compras navideñas con mucha gente y poco gasto

De los miles de previsores que adelantaron sus primeras compras, la mayoría eran pacenses, aunque también había portugueses y extremeños llegados de los pueblos que acudieron, principalmente, los grandes centros comerciales de El Corte Inglés y El Faro.

Otros muchos curiosearon por la calle Menacho y adyacentes, donde se encuentra la mayor densidad de tiendas de la ciudad. Prácticamente todas estaban abiertas ayer, aunque el pequeño comercio no sea partidario de esta liberalización del comercio que permite abrir cada vez más domingos. El de ayer, sin embargo, era uno de los festivos en que merecía la pena el esfuerzo, aunque fuera para darse a conocer y mostrar el género, indicaba una comerciante de una calle aledaña a Menacho.

Atractivos para la gente

Precisamente para competir con las grandes superficies, donde ayer había más público, las asociaciones de comerciantes decoraron de forma especial su zona.

En las vías perpendiculares a Menacho se colocaron alfombras rojas. El resto de detalles eran músicos, una payasa ofreciendo globos de colores a los niños en un expositor patrocinado por el Ayuntamiento con el eslogan 'Badajoz, ciudad de compras'; otro 'photocall' adornado con un espectacular Santa Claus hecho con globos, en este caso en la calle Francisco Pizarro; un flashmob (baile supuestamente improvisado por los viandantes) para sorprender a los compradores; y un parque infantil en el Baluarte de Menacho eran parte de los atractivos ideados por la asociación de comerciantes junto con la colaboración del Ayuntamiento.

En esta línea, el próximo sábado, día 13, serán los comerciantes de Santo Domingo (paralela a Menacho) los que organicen talleres para atraer clientes, desde uno para saber cargar una mochila (Explorer) a técnicas de pintura (Cabezudo) o cómo hacer guirnaldas (Cosas de TT) y recetas y consejos gastronómicos (casa del bacalao), entre otros. Todo ello invitando a caña y panceta por compras superiores a 5 euros (Bar Deportivo).

Sin embargo, donde se concentró la mayor parte de compradores fue en El Faro. No hubo atascos, como suele haber en otras fechas más avanzadas de diciembre, pero el aparcamiento sí se mostraba prácticamente completo a la hora de comer, cuando los establecimientos de hostelería de este centro comercial exhibían largas colas.

Allí sólo la tienda de textil a bajo precio Primark tenía largas colas ante las cajas. «Uf, aquí no se puede ni entrar», decía una clienta al asomarse antes de darse la vuelta. El resto tuvo más afluencia que un domingo de cualquier otro mes. Y en los pasillos el tránsito se multiplicó, por lo que cualquier puesto de quita y pon ayer estaba abierto. Hasta seguros se vendían aprovechando que pasaban cientos de personas.

Sin embargo, en el interior de la mayoría de tiendas no se podía decir que estuviera atestadas ni que las cajeras no dieran abasto. Se notaba que la gente aún está eligiendo sus compras navideñas antes de decidirse a sacar la tarjeta.