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José Antonio Zambrano en la biblioteca de su casa en la que acostumbra a escribir. :: g. c.
Zambrano: «La poesía, aunque no resuelva nada, sí que es el consuelo de todo»

Zambrano: «La poesía, aunque no resuelva nada, sí que es el consuelo de todo»

'Ahora', la última obra del poeta extremeño, ha sido seleccionada entre los cinco mejores poemarios del país en 2019 por críticos literarios

GLORIA CASARES

ALMENDRALEJO.

Sábado, 11 de enero 2020, 09:46

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El poeta extremeño José Antonio Zambrano descubrió la poesía ya con más de treinta años, pero desde entonces no se ha separado de ella. Autor de una veintena de libros, este otoño ha publicado el poemario 'Ahora', casi cinco años después de su última publicación. Para muchos, este título es uno de sus libros más completos.

Su calidad le ha valido el reconocimiento de los críticos de poesía de un suplemento semanal, que han seleccionado 'Ahora' entre los cinco mejores libros de poemas del pasado año 2019.

«Estoy muy satisfecho, pues es gratificante que te reconozcan el trabajo hecho, y mucho más, que desde Madrid se ocupen de la poesía que se escribe en nuestra región, Extremadura».

El mismo autor, natural de Fuente del Maestre, reconoce que se siente sorprendido por la acogida del libro, «porque cuando uno saca a la luz un trabajo, que se viene gestando desde hace cinco años, lo que menos piensa es en el reconocimiento, pero sí sorprende gratamente y se agradece muchísimo».

En opinión de este poeta, el libro tiene algo distinto al resto de los suyos, a pesar de que considera que su poética tiene unos patrones, claves o estilo. «En él se nota más el paso del tiempo y el poso que ha dejado. Busco la verdad de la palabra, intentando huir de lo hueco y accesorio, busco la renovación lingüística, aunque suene pedante», confiesa el autor fontanés. «Pretendo una poesía como revelación y conocimiento y, creo, modestamente, que algo de ello está presente en 'Ahora'. Lo definiría como fidelidad o compromiso extremo con la palabra justa», asevera.

El libro, editado por 'Pre-textos', es fruto de mucho tiempo de trabajo, porque «soy muy pesado y obsesivo». «La coma que ayer era magnífica, hoy carece de sentido, y ese adjetivo que me parecía un hallazgo poético, hoy me parece manido y vulgar. Horrible el proceso de escritura. Escribo y reescribo una y otra vez. Nunca doy por acabado el poema. Padecimiento inherente a la búsqueda de la palabra exacta, como dice el prologuista Luciano Feria». Tanto que entre sus anécdotas está cuando su hijo Carlos estaba en preescolar y la maestra preguntó por el oficio de los padres, a lo que él contestó que su padre trabajaba escribiendo y rompiendo lo que escribía.

«Pero no todo es trágico, la poesía también la vivo como gozo: nadie sabe de la felicidad de un hallazgo verbal y de lo que supone esa toma de conciencia de uno mismo y del mundo», asevera.

El poeta describe 'Ahora' como una meditación sobre la poesía, sobre el oficio de escribir y el misterio de la vida y la muerte, que para él va todo unido. «Es una confesión».

16 poemas

La primera parte cuenta con 16 poemas, «es una reflexión sobre la esencia poética»; mientras que la segunda parte consta de 17 y aborda la responsabilidad del escritor con su obra, con la palabra exacta, con la verdad en la creación.

El libro se cierra con un poema largo, 'Poema del mar y de tus ojos', que constituye una especie de recopilación.

Sobre la situación que vive la poesía en España, Zambrano cree que son buenos momentos para la lírica, porque se está haciendo buena poesía, y Extremadura está ahí como parte de ella. «En la actualidad no vamos a la zaga, como lo demuestra el reconocimiento que están teniendo algunos de los poetas extremeños. Se está publicando en editoriales prestigiosas del país y se reciben premios a nivel nacional».

Y sobre la sociedad actual -reflexiona- «es cierto que estamos viviendo momentos duros, un mundo que resulta difícil de entender, al menos, para gente de mi generación. A veces tengo la sensación de que todos los valores por los que hemos luchado se están pulverizando, pero quiero ser optimista. Quiero pensar que detrás de todo ese ruido está el hombre o mujer con su sensibilidad, su inocencia, su verdad, su solidaridad y su deseo de justicia. Y la poesía, aunque no resuelva nada, sí que es el consuelo de todo», por lo que invita a leer poesía.

«Para mí, escribir es volver a vivir, vivir con plenitud el tiempo presente. Vivir y escribir son los vectores que mueven mi quehacer. Gasto las horas leyendo y escribiendo. Concibo la poesía como una pasión, como forma de vida, como padecimiento y gozo, o como dolor y gloria», sentencia.

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