Pique a la Play

Dice el refrán que en la mesa y en el juego se conoce al caballero y, aunque no creo que el refranero contemplase la estampa de cuatro hombres, hechos y derechos, reunidos en torno a una consola de videojuegos a las tres de la mañana, el dicho es perfectamente válido para comprobar cómo alguien puede pasar de ser el paradigma del hombre tranquilo en su vida social, laboral o familiar a transformarse en un visceral competidor en cuanto tiene entre las manos el mando de una Play. Consciente de que ser el más veterano de la 'kedada' supone un serio handicap, acudí a la cita con la intención de echar unas risas mientras era vilmente goleado por mis colegas, formados en las primeras versiones del Pro Evolution Soccer. Para darle más dramatismo al tema, dejé claro que yo jugaría siempre con el Atleti y que eso, de salida, quería decir que podía pasar cualquier cosa. No se me dio del todo mal y, a pesar de ser recriminado por no dar a conocer mi verdadero nivel (que yo mismo desconocía), la reunión sirvió para pasar un rato entrañable que sólo fue interrumpido por el dueño de la Play que, cansado de perder y alegando que su reciente paternidad le obligaba a regresar a casa, agarró la consola y el 'tupperware' en el que había traído la espléndida tortilla de patata que nos había preparado su mujer y disolvió la reunión. Eso sí, nos dejó con ganas de más regates al borde del área, pases de la muerte al llegar a la línea de fondo y remates imposibles, celebrados puño en alto como si hubieran supuesto la consecución de la décima Copa de Europa que, tiene toda la pinta, muchos sólo podrán ver este año en la PlayStation. http://blogs.hoy.es/pepeorantos