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F. G.
Sábado, 26 de abril 2008, 03:18
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Alrededor de 25 grados pegaba en las cabezas de los 106 ciclistas que tomaron ayer la salida de Guareña, un pueblo que once años después volvió a vivir una llegada de la Vuelta. «Fíjate si hace calor que, normalmente, los corredores se beben seis o siete bidones de agua durante una prueba, ¿y hoy ya llevan diez!», apuntaban Richard Romero padre y Richard Romero hijo, ambos masajistas del Fuerteventura-Canaria. Y aún quedaban 31 kilómetros por recorrer cuando le entregaron el décimo bidón. de medio litro cada uno.
Suelen llevar agua, sales minerales, preparados especiales... «Si un ser humano puede consumir al día alrededor de 1.000 calorías, un ciclista pierde en una etapa entre 7.000 y 8.000, dependiendo de los kilómetros y del calor. De ahí todos estos alimentos», prosiguen los cuidadores del equipo canario. Comen, durante la carrera, barritas energéticas, proteínas, frutas, bollos de chocolate... «Y sin frenar. No pueden. necesitan de todo esto para que no les de una pájara», avisan.
A excepción del colombiano Aranzazu, que sufrió una caída el jueves y ayer un desvanecimiento que le provocó el abandono de la Vuelta, todos los corredores concluyeron la etapa más larga y de mayor calor de los cinco días.
«Mi equipo está muy bien. Por tal y como lo hemos hecho en estos tres días, estamos obligados, o al menos ilusionados, en ganar la Vuelta», dijo un sonriente Kurt Bogaerts, director de equipo del Sean Kelly, tras la etapa. «Estoy contento. Pero todo esto es mérito del equipo. Si no gano yo, lo hará uno de mis compañeros», le secundó el maillot amarilla, el belga Benny De Schrooder.
«Es muy difícil lanzar un pronóstico cuando quedan dos etapas claves. La de mañana -por hoy- es una etapa muy larga para corredores muy hechos, así es que se llevará la Vuelta el ciclista más hecho, el que sepa dominar todos los terrenos», auguró el director de la Vuelta, Pepe Guillén, en el ecuador de la misma.
El vencedor de ayer, José Francisco Pacheco, de 26 años y natural de Valdepeñas, dudó en el sprint final: «Pensaba lanzar a Vidal, pero me encontré fuerte y me dijo que disputara la etapa yo». El propio Vidal lo corroboró: «Hay que repartir las victorias. Un día por ti y otro por mí».
Hora de Casar de Cáceres
Hoy se disputa la cuarta etapa, de 173 kilómetros con inicio y final en Casar de Cáceres (salida a las 12:25 horas en el Paseo de Extremadura y llegada al mismo sitio a las 16:37 horas) y las ascensiones a los altos de El Tajo (Km.122) y Riveros de Monroy (Km.159).
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