Una sucesión de incendios provocados acaba con seis contenedores del centro

La Policía Local busca quién o quiénes están detrás de los incendios en cadena de contenedores y basura que se produjeron el lunes por la noche. Entre las 21.30 y las 00.30 horas se prendió fuego a varias bolsas y contenedores que estaban en la calle Chantre, junto a la iglesia de San Pedro y a otras tantas apiladas en la Puerta del Sol, donde también ardió un contenedor verde. El recorrido terminó con cinco cubetas más comidas por el fuego en el punto verde anexo a la parada de autobús de la avenida del Valle (frente a la calle Antonio de la Cadena); en este último escenario la llamas también afectaron a un coche que se encontraba aparcado junto al foco.

Queda claro que el pirómano o los pirómanos siguieron un itinerario muy marcado que les llevó desde el centro de la ciudad hasta el parque de La Isla, dejando su huella cada pocos metros y actuando con una hora de diferencia en el caso de los dos primeros incendios; entre el de la Puerta del Sol y el de la Avenida del Valle, transcurrieron dos horas.

Los contenedores quedaron repuestos a primera hora de la mañana de ayer y han supuesto un gasto de 1.800 euros al Ayuntamiento, según indicó la Concejala de Servicios Municipales, Carmen Blázquez. Tres de los que ardieron son los verdes en los que se depositan residuos sólidos urbanos, valorados en 240 euros cada uno, mientras que el precio de los otros tres afectados es de 360, al tratarse de los de color amarillo destinados al depósito de envases de plástico.

La colaboración ciudadana fue vital para que las fuerzas de seguridad y los bomberos pudieran actuar con toda la celeridad posible ante este incidente. Los propios vecinos no dudaron en salir de casa con extintores para aminorar las llamas hasta que llegaran los profesionales.

Desde la Concejalía de Seguridad Ciudadana, su responsable Francisco Martín Simón, agradecía esta ayuda «inestimable, porque cuando ocurren sucesos como éste no podemos tener a un policía detrás de cada contenedor para evitar actos de gamberrismo». Hizo hincapié en la necesidad de que los vecinos llamen a la Policía Local cada vez que adviertan algún comportamiento sospechoso o incidentes como este.

Hechos puntuales

Desde el equipo de gobierno se considera que el incendio de los tres puntos de basura es un hecho puntual y se confía en que no vuelva a producirse, aunque se ha abierto una operación para identificar y detener a los autores, a los que se sancionará según estime la ley. Lo cierto es que hasta ahora no se habían producido más que incendios ocasionales en algún contenedor, pero no en varios prácticamente al mismo tiempo.

En cualquier caso, Martín Simón volvió a hacer un llamamiento al comportamiento cívico y recordó que estas actuaciones no hay que enmarcarlas únicamente en el ámbito de la falta de seguridad ciudadana, sino también en el de la ausencia absoluta de respeto hacia un patrimonio popular como es el mobiliario urbano cuyo coste repercute en el bolsillo de todos los contribuyentes. Algunos, sin embargo, parecen no verlo como cosa propia.