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Niñas bailando ayer las 'mayas' en el festival. :: f. h.Carpa de la Hermandad de las Fiestas de la Santa Cruz. :: f. h.
Cruces y 'mayas' mantienen el sabor de la tradición

Cruces y 'mayas' mantienen el sabor de la tradición

El popular festival volvió a abarrotar ayer la carpa en el barrio de la Cruz del Río

FRAN HORRILLO

Domingo, 3 de mayo 2015, 12:57

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El sabor a tradición volvió a palparse de nuevo ayer en el barrio de la Cruz del Río, en donde mayo, el mes de las flores por antonomasia, es recibido con diversión, pero también con respeto a las costumbres.

Ese toque de tradición se lo impregnan los grupos de 'mayas', que se dejan llevar por las notas musicales de las jotillas que marcan sus populares bailes, o las cruces, que lucen adornadas de llamativas flores.

De hecho, en las fiestas de este barrio que se celebran desde el jueves, una de las citas más esperadas es el festival de 'mayas' y cruces, que ayer volvió a abarrotar la carpa de la hermandad. Una actividad que en los últimos años ha tenido un objetivo claro, como es el de rescatar la tradición y mantener vivo el rico legado folclórico de la localidad. Y, para ello, se sigue implicando a los más jóvenes, que se encargan de revivir las costumbres locales con el paso de los años.

Por eso, a más de uno le embargó ayer la emoción al ver a niñas y a niños de apenas tres o cuatro años, bailando con gracia al tiempo que entonaban la popular estrofa de «a la pobrecita 'maya', una perrita siquiera...».

No obstante, el festival, que reunió a 26 grupos de 'mayas' -15 benjamines, 10 infantiles y un cadete- y a 7 cruces, es testimonial, pues la verdadera tradición marcaba que las 'mayas', que eran las niñas, salieran en grupos en la tarde del 2 de mayo, con el fin de ir pidiendo donativos por las calles o por las casas. La petición se formulaba con la expresión «una perrita pa' las pobrecitas mayas», al tiempo que se hacía sonar la caja donde iban las monedas. Cada donativo venía a recompensar la jotilla que cualquier persona que colaboraba les hacía bailar y cantar a estas 'mayas', que iban ataviadas con lazos y bandas de seda de colores.

Legado folclórico

Asimismo, el 3 de mayo por la mañana, día de la festividad de la Santa Cruz, les tocaba el turno a los grupos de chicos que, sobre ligeras andas, portaban cruces cubiertas de flores. Estos también hacían su petición al son de «una perrita pa' la Santa Cruz», pero su cometido tras recibir el donativo no era el baile, sino el de recitar la popular estrofa: «Qué viva, qué viva la Cruz Sacrosanta. Qué viva, qué viva y quien la llevó. La lleva Jesucristo, que es Nuestro Redentor».

En este puente, lo cierto es que se han podido ver tanto a grupos de 'mayas' como a niños llevando sus cruces. No eran muchos, pero los suficientes para no dejar morir un legado folclórico tan pegado a las tradiciones villanovenses.

Hoy domingo las fiestas culminarán con la procesión de la Santa Cruz. Unas fiestas, por cierto, en donde los distintos candidatos a la Alcaldía, como el socialista Miguel Ángel Gallardo o el popular Manuel Lozano, se han dejado ver. Incluso el actual presidente regional y candidato regional del PP, José Antonio Monago, degustó el viernes la deliciosa paella que se sirvió por parte de la hermandad.

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