Borrar
¿Qué ha pasado hoy, 18 de marzo, en Extremadura?
Una de las imágenes que forman parte de la exposición del Hospital Infanta Elena de Valdemoro.
Apenas nacen y ya luchan

Apenas nacen y ya luchan

Una exposición de fotografías de neonatos que luchan por sobrevivir en la unidad especial del Hospital Infanta Elena muestra la cara menos conocida de estos pequeños héroes y sus familiares. El autor es el padre de uno de ellos

L. Ontiveros

Miércoles, 22 de junio 2016, 19:16

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

El fotógrafo Rafael Dávila fue testigo de cómo su hijo recién nacido, al que se le detectó un neumotórax, luchaba contra la muerte durante cinco días. Sucedió en la Unidad de Neonatos del Hospital Universitario Infanta Elena de Valdemoro, y le inspiró un trabajo fotográfico que ahora es expuesto en ese mismo centro de la Comunidad de Madrid.

«No tuvimos que estar en la Unidad de Neonatos más que cinco días, pero hoy sé que esos cinco días salvaron la vida de mi hijo, y además constituyeron para mí una escuela impagable», recuerda Dávila, durante la inauguración presidida por la doctora Marta Sánchez Menam, directora médica del hospital, y Gema Sánchez Gómez, responsable de Atención e Información al Paciente. «Para mostrar nuestro agradecimiento a toda la gente del hospital decidí proponerles contar esta historia con fotografías que sirvan además de apoyo a todos los padres que tengan que pasar por una situación parecida en el futuro».

La Unidad de Neonatos del Hospital Universitario Infanta Elena de Valdemoro cuenta con ocho cunas de hospitalización y un equipo formado por ocho profesionales sanitarios, entre neonatólogos (cuatro) y personal especializado de enfermería. «A pesar de estar lleno de recién nacidos que aun no han visto la luz del día por sus diferentes problemas, transmite tranquilidad y paz. Un lugar donde tienes la sensación de que nada malo puede ocurrir. El día transcurre entre tomas de pecho, biberones, baños, medicaciones...», recuerda Dávila. «Las personas que trabajan en este lugar tienen una sonrisa constante, una mano para ponerte sobre el hombro en todo momento, una capacidad para tranquilizar y normalizar una situación que es muy complicada».

El año pasado, la unidad tuvo ingresados a 169 pacientes. A veces los padres deben marcharse a sus casas sin su bebé y es ese personal especializado el que se hace cargo de todo lo que necesiten los delicados recién nacidos. «Me parecía injusto que no se conociera el trabajo que se hace en este hospital y en especial en esta unidad», concluye Dávila.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios