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Marisol Guisasola/Mujerhoy.com
Jueves, 5 de marzo 2015, 11:32
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¿Tiras las hojas exteriores de las lechugas, las más verdes, cuando preparas tu ensalada? Que sepas que esas hojas, las más expuestas al sol, son también las más ricas en vitaminas, minerales y muchas otras sustancias que protegen tu salud de la cabeza a los pies, pasando por el corazón, la vista y la piel.
¿Tiras siempre esas hojas porque las encuentras ásperas y duras? Prueba entonces con lechugas baby (de hojas abiertas y verdes, que aún no han desarrollado cogollo) o cambia la lechuga por berros, canónigos, hojas de espinaca y, si los encuentras, minibrotes de la planta del guisante: sus hojas chiquititas, tiernas y verdes dan fe de que han estado expuestas al sol y de que, como consecuencia, han desarrollado montones de sustancias protectoras.
Una cualidad fantástica de las ensaladas verdes es que sacian con poquísimas calorías. Una taza de berros tiene solo 4 calorías; una de hojas de espinacas, alrededor de 7, más o menos lo mismo que las de la lechuga tierna, la rúcula o los canónigos. (Más información en Mujerhoy.com).
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