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El arquitecto Luis Moreno Mansilla./ Guido Manuilo (Efe)
El arquitecto Luis Moreno Mansilla muere repentinamente
a los 53 años

El arquitecto Luis Moreno Mansilla muere repentinamente

Su cuerpo ha sido hallado sin vida en el hotel donde se alojaba en Barcelona, adonde se había desplazado para participar en un evento

MIGUEL LORENCI

Miércoles, 22 de febrero 2012, 21:26

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El dulce momento que vive al arquitectura española se debe en buena medida al talento y el trabajo de pujantes y reconocidos profesionales como Luis Moreno Mansilla (Madrid, 1959), fallecido inopinadamente el miércoles en Barcelona con solo 53 años. En apenas tres décadas de trabajo renovó junto a su inseparable EmilioTuñón el panorama arquitectónico y dejó una imborrable impronta en la profesión, firmando proyectos icónicos como el Museo de Arte Contemporáneo de Léon o el Archivo histórico de la comunidad de Madrid, recuperando y redefiniendo una vieja fábrica de cervezas.

Casado con la pintora Carmen Pinart y padre de dos hijas, Mansilla era además desde 1986 profesor de proyectos en la Escuela Politécnica de Madrid, en la que se licenció en 1982. Estaba convencido de que este centro académico era el gran semillero de los brillantes profesionales que ha colocado en un primerísimo plano a la arquitectura española en las últimas décadas.

Fue el propio Emilio Tuñón quien encontró el cuerpo sin vida de Mansilla en el hotel en el que pernoctaba. Tuvo que afrontar el doloroso deber de comunicar la pérdida de su socio y compañero, fallecido repentinamente y por causas que esclarecerán los forenses en la noche del miércoles en la ciudad Condal. Con él constituyo Tuñón uno de los dúos arquitectónicos más brillantes y reputados de las últimas décadas.

La abrupta muerte de Mansilla causó dolor e incredulidad entre sus compañeros de profesión. Con muchos de ellos había compartido velada el martes en la presentación de un libro dedicado a Enric Miralles, otro gran y recordado arquitecto fallecido repentinamente y en plenitud profesional hace ahora doce años.

Mansilla y Tuñón se aliaron profesionalmente en 1992, después de que ambos abandonara el estudio de Rafael Moneo, uno de los grandes 'popes' de nuestra arquitectura a cuya sombra trabajó Mansilla durante casi una década. Ambos diseñaban "paisajes sociales" trabajando sobre "mapas de ideas" que desarrollaban por temas en busca de soluciones límpida y sencillas. "De cada proyecto nos llevamos ideas, obsesiones, que metemos en la mochila y que ya no nos abandonan. Al final, todo eso va de transformaciones. La vida es transformación y nosotros sólo queremos que la arquitectura no la detenga», explicó Mansilla en su día.

Hitos

Juntos jalonaron la geografía española de hitos de nuestra modernidad arquitectónica y cultural, con logros como el colorista MUSAC de León -premio Mies Van der Rohe y de la Unión Europea-, el hotel y restaurante Atrio en Cáceres o el Museo de Colecciones Reales de Madrid, proyecto en fase de construcción que alterará el perfil de uno de los enclaves más nobles de Madrid, junto al Palacio Real y la catedral de la Almudena.

En su estudio 'Mansilla + Tuñón' también se diseñó el Museo de Bellas Artes de Castellón, el Auditorio de León -Premio Nacional de Arquitectura-, el museo de Zamora, y las sedes de la fundación Helga de Alvear en Cáceres y Barrié de la Maza en Vigo.

El MUSAC leonés fue sin duda un punto de inflexión de su trayectoria, el gran éxito de su carrera y un resumen de sus ambiciones profesionales. Les dio además un nombre entre el gran público, por lo común ajeno a la autoría de muchos edificios públicos. "Una de las cosas más importantes que le ha pasado a la arquitectura durante estos años es el fenómeno del público» dijo Mansilla en 2007 "Antes no existía; ahora lo primero que piden en un concurso es un vídeo con tu proyecto para que la gente debata" ironizaba.

El trabajo de Mansilla y Tuñón, caracterizado por la pureza de líneas y el juego con volúmenes puros, tuvo pronto un gran reconocimiento a escala internacional, aunque el grueso de su obra está en España. Sus proyectos han recibido distinciones como el premio FAD que se les otorgó en tres ediciones (2001, 2007 y 2011), el Aplus en 2011, el premio AD Architectural Digest (2009), el Mies van der Rohe (2007), el Saloni (2007), el VIA (2006), premio nacional de arquitectura (2003), el COACV (2000), Excellent Work Award (2000), Primer premio de la bienal de arquitectura iberoamericana (1998), el de Fundación CEOE (1997) y el galardón Arquitecti (1996).

Se les abrieron las puertas de grandes centros universitarios estadounidenses como Princeton y Harvard. También recalaron en la Escuela de Arquitectura de Puerto Rico. En Europa colaboraron con la suiza Ecole Polytechnique Federale de Lausanae y la Städelschule de Fráncfort y en España impartieron másteres en la Escuela internacional de arquitectura de Barcelona, en la Fundación de arquitectura San Pablo CEU, y las escuela de Arquitectura de Barcelona y Navarra.

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