Rubalcaba y Chacón arrancan con empate técnico una semana clave

Lunes de recuento para los candidatos a la Secretaría General del PSOE. Acabó la primera de la batalla, la de la elección de los delegados locales que, a su vez, deben designar a los representantes con voz y voto en el Congreso de febrero, pero no hay certidumbres que permitan aventurar cómo acabará la batalla. Con las maquinarias propagandísticas a pleno rendimiento, resulta difícil discernir el dato de la opinión.

Todos se dicen satisfechos. Desde la 'atalaya' de la neutralidad, sin embargo, fuentes de la organización advierten de que conviene seguir el cruce de cifras con cautela y hablan más bien de empate.

En todo caso, los partidarios de Carme Chacón dicen que han herido psicológicamente al adversario con su victoria en feudos que 'a priori' se le suponían afines. Y el equipo del, por ahora, jefe de la oposición asegura que, en el cómputo global, Rubalcaba lleva ventaja.

A la espera de que el fin de semana se celebren los 'congresillos' provinciales de los que saldrán los 972 delegados finales, los 'rubalcabistas' dicen que pueden lograr la mayoría en 15 de las 17 comunidades autónomas.

Es mucho, pero no como para echarse a dormir. Nada se atreven a decir por el momento de Andalucía, la más importante de todas las federaciones y la que aporta al Congreso el 25% de los delegados. Y, no sólo eso, también admiten sin reparos que en Cataluña su oponente cuenta con una mayoría clara, y el PSC aporta ni más ni menos que el 11% de los votos.

Los afines a Chacón sostienen, por su parte, que las cosas les han ido mejor en las asambleas locales de lo que nunca creyeron sus oponentes y con singular satisfacción se vanaglorian de los resultados en Cantabria, en Cádiz, en la Comunidad Valenciana, y en puntos clave de Castilla-La Mancha y de Castilla-León. También blanden como propias las cifras de Madrid y, sin embargo, esta federación, la cuarta en número de militantes, puede dar la sorpresa.

El secretario general de los socialistas madrileños, Tomás Gómez, siempre quiso que hubiera una alternativa a Rubalcaba, con el que ha tenido enfrentamientos sonados y al que profesa poco afecto. Por ese mismo motivo, animó a Chacón a dar un paso al frente. Pero eso no quiere decir que respalde al cien por cien su candidatura y este lunes lo dejó claro al advertir de que él aún no ha tomado postura; no, claro está, porque vaya a dar la vuelta a su planteamiento inicial y, de pronto, vaya a inclinarse por el exvicepresidente primero sino porque sostiene, o quizá avisa, que aún puede aparecer un tercer aspirante.

Contrarreloj

No es la primera vez que Gómez se insinúa. Pero en lo que coinciden los organizadores del proceso es en que, cuanto más tiempo pase, más difícil será para un espontáneo lanzarse a la piscina y reunir los 192 avales de delegados necesarios para oficializar la candidatura -Chacón y Rubalcaba, de momento, son sólo 'precandidatos' gracias a los avales recabados en el Comité Federal-. Otros, recuerdan que José Luis Rodríguez Zapatero no anunció su deseo de optar a la Secretaría General hasta el último de los congresos. Sin embargo, la plataforma 'Nueva Vía' ya le había hecho un trabajo previo en un recorrido intenso por todas las federaiones.

Las esperanzas de un tercero en discordia, salvedad hecha del propio Gómez, son de hecho cada vez más reducidas. El alcalde de Toledo, Emiliano García-Page deja cada día más claro que sus intereses están en Castilla-La Mancha y que, aunque aproveche el momento para reivindicar que la voz del municipalismo, y la suya propia, sea escuchada, no optará a liderar el PSOE. Y quienes deseaban, y eran muchos y de mucho peso, que el joven Eduardo Madina cogiera el toro por los cuernos hace tiempo que se dieron por vencidos.

La elección estará pues, si nadie lo remedia, entre una candidata que ofrece, como propuesta distintiva, democratizar el partido y permitir que incluso el secretario general sea designado directamente por los militantes, y un aspirante que cree fundamental unificar el discurso del PSOE en toda España.