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ELOY GARCÍA
Lunes, 18 de diciembre 2017, 08:25
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Celebrar concursos de decoración entre barrios con elementos reciclados, decorativos naturales y artesanos y organizar veladas de observación del cielo son algunas de las propuestas que hacen los alumnos de la escuela profesional 'Verateando, por un turismo de calidad'. Las mismas las dieron a conocer en las recientes jornadas de difusión celebradas en Madrigal, a las que asistieron representantes de las seis poblaciones veratas que conforman este proyecto, así como empresarios y técnicos del sector turístico.
A lo largo del último año, los alumnos han llevado a cabo un estudio de potencialidades turísticas de la comarca, que se ha articulado a través de un estudio Dafo (herramienta de estudio de la situación de una empresa o institución, analizando sus características internas y su situación externa) sobre recursos patrimoniales y servicios turísticos con el fin de focalizar las debilidades, amenazas, fortalezas y oportunidades que se presentan. En esta misma línea se han realizado actuaciones, mejoras y aprovechamiento de los recursos en uso, actuando frente a la saturación que por ejemplo sufren las zonas de baño y a la estacionalidad, promoviendo acciones para el turismo en temporada baja, aportando ideas «para crear experiencias con nuestra naturaleza y cultura».
Fruto de este trabajo es el plan de dinamización turística dado a conocer entre los presentes, del que los autores destacan dos iniciativas. Por un lado, la celebración de concursos de decoración entre barrios con elementos reciclados, decorativos naturales o artesanos «que fomentaría también la convivencia entre vecinos y sus relaciones».
Por otro lado, proponen aprovechar miradores ya construidos, máxime «contando con nuestro cielo, libre de polución y de contaminación lumínica». Aquí subrayan que además del auge que está obteniendo la observación del firmamento nocturno, se debería sacar partido «a lo acontecido en nuestro cercano Parque Nacional de Monfragüe, que ha implantado esta actividad y se le ha otorgado en marzo de 2017 el premio de la Nasa al cielo más limpio del mundo». De ahí que propongan que se habiliten enclaves para este fin «dotándolos de lo necesario y publicitándolos, organizando veladas para observar estrellas, lunas, galaxias...», afirman.
La jornada divulgativa, que también incluyó la exposición de un trabajo de campo con estadísticas y gráficas en las que se encuentra el resultado de las encuestas realizadas sobre la procedencia de los visitantes, ya fuesen de España o del resto del mundo, que pasaron por el Museo del Empalao y por otros atractivos turísticos de la zona, valorando estos diferentes aspectos turísticos de la comarca, finalizó con una proyección de diapositivas sobre el año de trabajo y convivencia entre alumnos y profesores. «Con el anhelo de que este trabajo se aproveche y difunda, no sólo a las entidades públicas si no también privadas, daríamos por aprovechados estos doce meses», concluyen.
Entre los presentes en el acto se encontraba el primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de esta población, José Julio Tiemblo, quien recuerda que entre los objetivos de esta escuela profesional se encuentra que los profesionales del turismo y la hostelería tengan una buena formación que revierta en sus conocimientos y atención, y que a su vez esta mejora atraiga más turismo de calidad. «Hemos pretendido buscar un perfil de candidatos que ya tuviesen un mínimo de estudios, mínimo con el Bachillerato acabado, para así incidir en elevar su nivel de formación, buscando promocionar el turismo y que este sea de calidad», señala.
En cuanto a la inserción laboral de los alumnos, José Julio Tiemblo manifiesta que al menos cinco de ellos van a hacer ya prácticas en empresas, con bastantes posibilidades de acabar las mismas con un contrato de trabajo. De igual forma, destaca que todos han sido excelentemente preparados no solo para trabajar en empresas del sector, sino para ser emprendedores e iniciar una actividad propia. «A lo largo de este año han hecho un trabajo muy bueno, muy satisfactorio para todas las partes, y están perfectamente capacitados para optar por cualquiera de las dos opciones», asevera.
La escuela profesional, recientemente clausurada, ha estado formada por 15 jóvenes y tres profesores de los diferentes municipios adheridos a la iniciativa, entre los que se encuentran Villanueva, Valverde, Talaveruela, Viandar, Robledillo y Madrigal.
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