Casero apuesta por contar con más patrimonio histórico

Casero explicó que gran parte de los monumentos y palacios de la parte antigua están en manos privadas. Aun reconociendo la labor que han hecho en su recuperación, la zona monumental se ha convertido en un museo al aire libre, con poca vida. Ante este hecho, la idea del Gobierno es recuperar, en la medida de sus posibilidades, la mayor parte del patrimonio para el uso de los vecinos.

El mandatario trujillano aseguró que si el Ayuntamiento hubiese tenido dependencias en la casco histórico, hubiese trasladado servicios. Incidió en que ahora no dispone de dinero y no quiere seguir endeudando al Ayuntamiento. Si no fuera así, seguiría con la adquisición de inmuebles. Una oportunidad es el palacio de los Escobar, que está en manos de una entidad financiera y que lo ha puesto a disposición de la Administración local.

Tanto el alcalde, como el portavoz popular, Julio Bravo, recordaron que el plazo para la presentación de propuestas para la construcción de ese centro terminó ayer. Así mismo, defendieron este proyecto, porque, aunque la situación no es buena, «no solo se trata solo de practicar la ayuda social». Apuntan que hay que seguir haciendo cosas.

El portavoz del Partido Socialista, Fernando Acero, votó en contra de esta iniciativa porque considera que el momento es el «más inoportuno» para hacer esta inversión, a pesar de que no discute que el proyecto pueda ser bueno. A su grupo le preocupa la situación por la que pasa el municipio, como el numero de parados y que el Consistorio se endeude más. Acero también puso en duda que el dinero que se dedique a la obra, así como el plazo de ejecución de tres meses, sea suficiente para su finalización. No le extrañaría que al Ayuntamiento le toque poner algo más.

El concejal de IU, Joaquín Paredes, defendió la puesta en marcha de este propuesta. «Somos defensores de la política de enseñar a pescar y con esta inversión se enseña, y no de practicar la caridad».

En esta sesión plenaria también se debatieron diversos modificaciones urbanísticas. Una de ellas estuvo relacionada con las alegaciones del nuevo planeamiento del sector 5, terreno situado en el margen izquierdo de la avenida de Extremadura. En este debate no participó Fernando Acero, al tener un negocio en esta zona.

Denuncias y recursos

Como ya adelantó el portavoz popular, se estimaron parcialmente dos alegaciones de las cinco presentadas. Julio Bravo recordó que la propuesta es disminuir la superficie de suelo terciario y aumentar a suelo residencial. El mandatario trujillano insistió en que el margen político es muy pequeño en este tipo de cuestiones, ya que se adhieren a lo que dicen juristas y urbanistas. A pesar de ello, reconoce que, a estas decisiones administrativas, le sucederá una serie de denuncias y recursos. Aseveró que el equipo de Gobierno debe actuar, ya que hay denuncias por la inactividad de la administración en este sentido. Por ello, «no podemos esperar al Plan General Municipal».

La socialista María Curiel, que defendió la postura de su grupo, votó en contra porque no está de acuerdo en que se disminuya el suelo terciario en esta zona, ya que considera que es necesario. A Paredes, así mismo, le surgen dudas el planteamiento del equipo de Gobierno. «La solución no es la peor pero tenemos certezas e incertidumbres». Por ello, se abstuvo.