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FRANCISCO JOSÉ NEGRETE
Sábado, 23 de septiembre 2017, 09:57
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El Pleno aprobó con los votos de la mayoría del grupo de gobierno de Orpo y la abstención de Ipal que el Ayuntamiento se acoja a un plan por el cual puede sustituir la aplicación de retenciones de los tributos del Estado por la deuda con proveedores por la formalización de un préstamo con cargo al fondo de financiación de las entidades locales. Esas retenciones se producen porque Hacienda liquidó las deudas del Consistorio con los proveedores en el año 2013, cuando el Ayuntamiento presentó un total de 847 facturas impagadas, el mayor número de todos los ayuntamientos extremeños, seguido por el de Almendralejo, con 819, Don Benito, 719, y Mérida, 555.
El alcalde, Ángel Vadillo, explicó que un requisito es formalizar un plan de ajuste y aceptar el control del cumplimiento del mismo. El portavoz de Ipal, Manuel Gutiérrez, preguntó si el Consistorio no estaba ya acogido a un plan de ajuste y el alcalde respondió que no quiso hacerlo en su día «porque las medidas exigidas eran contrarias a la filosofía del Ayuntamiento». Gutiérrez insistió varias veces en que se facilitara la cuantía de la deuda con Hacienda que falta por liquidar.
Hacienda debe ahora aprobar o no el plan de ajuste municipal.
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