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Un ciudadano introduce envases ligeros de plástico en un contenedor de Miralvalle. :: david palma
Plasencia eleva la cantidad de envases ligeros reciclados, pero baja la calidad

Plasencia eleva la cantidad de envases ligeros reciclados, pero baja la calidad

El contenedor amarillo recibe 13,1 kilos por habitante y año mientras los impropios aumentan hasta el 38,4%

Claudio Mateos

Plasencia

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Lunes, 16 de julio 2018, 08:40

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Los placentinos son los extremeños que más envases ligeros reciclan, pero lo hacen cada vez con menos calidad. Los datos de 2017 reflejan que la cantidad de plásticos arrojados al contenedor amarillo subió en la ciudad en 4,6%, hasta los 13,1 kilos por habitante, en relación al año anterior. Sin embargo los denominados impropios (residuos que no corresponden a ese contenedor) se elevaron hasta el 38,4% del total del material reciclado, frente al 36% de 2016.

Estos datos, aportados al Ayuntamiento por la empresa Ecoembes, reflejan que hay un elevado número de placentinos concienciados con el reciclaje, pero falta formación sobre qué residuos van al contenedor amarillo y cuáles no. En los próximos días se va a poner en marcha una nueva campaña informativa que consistirá en colocar en estos contenedores una gran pegatina con dibujos sobre los tipos de envases que sí corresponde arrojar en ellos.

«Es preferible no reciclar que reciclar mal», afirma el concejal de Servicios Municipales, Luis Miguel Pérez Escanilla, encargado de presentar la campaña la semana pasada. El edil señaló que un alto número de impropios eleva el coste del reciclaje por la necesidad de separar los residuos a mano posteriormente en la planta de tratamiento. Además, el Ayuntamiento pierde una bonificación que tendría si los impropios se redujeran por debajo del 30%. Pérez Escanilla detalló que en Plasencia la mayor parte de los objetos que se arrojan de manera errónea al contenedor amarillo son juguetes de plástico, utensilios de cocina, ropa, papel y cartón.

El Ayuntamiento ahorraría dinero en tasas de reciclaje si los impropios se situasen por debajo del 30%

Control del volumen

El concejal ofreció un serie de consejos para que las personas que desean reciclar lo hagan correctamente y con la menores molestias posibles para ellos. Por ejemplo, una de las principales quejas que afirma recibir por parte de los ciudadanos es que muchos de estos envases ligeros, como botellas de agua y otros recipientes de plástico, ocupan mucho volumen en casa y también es complicado introducirlos por el pequeño agujero superior de los contenedores amarillos. «La botellas se pueden aplastar para que ocupen menos, y en cuanto a los agujeros, se hacen así porque hay estudios que demuestran que si la tapa grande del contenedor se pudiese abrir el número de impropios subiría un 20%», afirmó.

Plasencia es una de las 12 localidades extremeñas seleccionadas por Ecoembes para participar en el denominado 'Reto amarillo', que consiste en intentar aumentar el número de envases ligeros reciclados en un 10% en dos meses. Los municipios que lo consigan recibirán como premio 1.000 euros para destinarlos a una entidad benéfica de su elección. Pérez Escanilla anunció que si Plasencia lo consigue el dinero será entregado a Cáritas. La campaña de Ecoembes incluye tres acciones informativas en la vía pública que se están llevando a cabo los días 29 de mayo, 26 de junio y 24 de julio.

Ecoembes premiará a la ciudad si en dos meses logra aumentar los residuos reciclados un 10%

«Es preferible no reciclar que reciclar mal», afirma el concejal de Servicios Municipales

Plasencia cuenta en la actualidad con 315 contenedores amarillos, 116 de ellos de carga lateral y el resto superior. Eso supone estar por encima de los ocho litros de espacio por habitante que recomienda Ecoembes para que el reciclaje pueda ser eficiente. Los 13,1 kilos de residuos por habitante que se depositaron en ellos en 2017 superan la media extremeña, que fue de 10,9 kilos, pero queda aún por debajo de la nacional, que alcanzó los 13,9 kilos, según los datos de Ecoembes, la organización sin ánimo de lucro que se ocupa de gestionar y promocionar el reciclaje de envases ligeros en España.

Pérez Escanilla señaló que, si bien reciclar no es obligatorio, sí es «un acto de responsabilidad y de compromiso con el medio ambiente». Insistió, eso sí, en que si se opta por hacerlo se lleve a cabo correctamente, depositando cada tipo de residuo en el contenedor que le corresponde. También se mostró a favor de cambiar la ordenanza municipal para dejar claro «por puro sentido común» que los residuos del contenedor amarillo se pueden depositar a cualquier hora del día, pues no producen malos olores. Con la actual redacción sólo se podría hacer a partir de las 21.00 horas. Sin embargo, matizó que la Policía Local no sanciona a nadie por depositar residuos en los contenedores amarillos fuera de la hora recogida en la normativa.

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