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Acto militar celebrado en el patio del cuartel. :: david palma
La Constancia, un icono de Plasencia

La Constancia, un icono de Plasencia

Construido entre finales del siglo XIX y principios del XX como colegio para huérfanos, fue cuartel hasta 1992 y desde 1998 es centro universitario

CLAUDIO MATEOS

Domingo, 15 de enero 2017, 11:15

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Los poco más de 8.000 habitantes que tenía entonces Plasencia se quedaron estupefactos cuando, en 1895, los herederos de Calixto Payán y Vargas, Marqués de la Constancia, iniciaron la obra de un enorme edificio de 4.700 metros cuadrados de planta en los por aquel entonces deshabitados parajes de San Antón. El inmueble se convirtió desde que fue terminado cinco años después en una de las grandes referencias arquitectónicas de la ciudad, primero como acuartelamiento del Ejército, y desde 1998 como sede del Centro Universitario de Plasencia.

La Universidad de Extremadura (Uex) y el Ministerio de Defensa han presentado esta semana 'La Constancia. Un proyecto para Plasencia', iniciativa que a lo largo del próximo mes de mayo va a repasar la historia del edificio con una serie de exposiciones, conferencias y mesas redondas que concluirán con la publicación de un libro sobre una de las construcciones más emblemáticas no sólo de Plasencia, sino de todo el norte extremeño.

El edificio La Constancia es el fruto de una gran ambición. Desmedida, a decir de algunos. Calixto Payán había fundado en 1869 un colegio para niños huérfanos en la calle del Rey, pero la gran necesidad de la época hizo que en poco tiempo se quedara pequeño. A finales del siglo XIX comenzó la obra del nuevo colegio, de estilo modernista muy al gusto de la época, sin reparar en gastos ni en el tamaño porque la idea era que pudiera dar cabida a todos los huérfanos de la zona.

Según explica el presidente de la asociación cultural Pedro de Trejo, Francisco Valverde, el empeño económico fue enorme y se vio agravado por diversas irregularidades, entre ellas algunos desfalcos, que hicieron quebrar a la fundación que se ocupaba de gestionar el legado de Calixto Payán. El imponente edificio de más de 20.000 metros de superficie construida se terminó de levantar en 1905, pero nunca llegó a utilizarse para su finalidad original más allá de algunos campamentos de verano organizados para los huérfanos. El 13 de noviembre la fundación se lo vendió al Ministerio de la Guerra, dando inicio así a la larga trayectoria militar que ha tenido el inmueble, la cual definió también el urbanismo del entorno con la construcción de varios edificios de viviendas para oficiales y suboficiales.

A partir de entonces, y hasta 1992, mantuvo el uso militar. Al principio se utilizó como acuartelamiento temporal, y después fue sede fija durante largo tiempo, entre 1940 y 1985, del Regimiento Órdenes Militares 37. Durante ese tiempo acogió también a otras unidades del Ejército, como el grupo de operaciones especiales COE 12, el Regimiento de Voluntarios de Plasencia o, más recientemente el CIR Centro.

El uso de La Constancia como centro de formación comenzó en 1965, cuando llegaron al cuartel los primeros 1.104 reclutas de dos batallones del CIR 3 Santa Ana de Cáceres. Se mantuvo como CIR Centro hasta 1990, dos años antes del cierre definitivo. Fueron 25 años de actividad formativa en los que miles de jóvenes realizaron el servicio militar de Plasencia. Muchos de ellos han mantenido la amistad con el paso del tiempo, y hoy en día hay varios grupos de Facebook donde comparten recuerdos y vivencias.

La marcha definitiva del Ejército supuso el cierre del cuartel de La Constancia el 31 de diciembre de 1992, un año en el que ya tan solo se habían formado en él 97 reclutas. El acontecimiento supuso un trauma para la ciudad en aquel entonces, ya que perdía una de sus señas de identidad y una importante fuente de ingresos y de actividad económica. Hubo protestas ciudadanas y declaraciones muy sonadas de dirigentes políticos y vecinales en contra del Ejército, al que acusaban de haber mantenido ocultas sus intenciones de marcharse se Plasencia hasta que ya no había vuelta atrás. Entre ellas trascendió las fronteras locales el «duelo con armas» al que el entonces alcalde accidental en sustitución de Cándido Cabrera, Buenaventura Duarte, retó en el mes de septiembre de 1990 a tres jefes militares, a quienes acusaba de querer cerrar el cuartel. Poco tiempo después se demostró que llevaba razón.

La Junta de Extremadura decidió entonces convertir La Constanciaen un centro educativo primero, y después en la sede de la universidad en Plasencia para trasladar allí los dos estudios de la Uex que se impartían en la ciudad, Empresariales y Enfermería, a los que después se añadieron otros nuevos. Rehabilitar el edificio para esa finalidad supuso una inversión de 7,7 millones de euros. Las obras finalizaron en 1998, y en el curso 1999-2000 se incorporaron al nuevo campus las nuevas carreras de Ingeniería Técnica Forestal y Podología.

Actualmente el centro cuenta con esos mismos grados de la Uex, además de una Universidad de Mayores con cerca de 400 alumnos, una residencia universitaria con 104 plazas que gestiona la Junta, y otros servicios como el Centro de Profesores y Recursos, o algunos módulos de Formación Profesional.

En 2012 se presentó un expediente para declarar el edificio bien de interés cultural, el cual se encuentra pendiente de resolución por parte de la Junta de Extremadura.

En las diversas exposiciones que forman parte del proyecto de la Uex y Defensa podrán verse documentos como los planos originales del edificio, fotografías antiguas de todas las épocas -entre ellas de las multitudinarias juras de bandera que se celebraban en el parque de La Coronación-, escudos, banderas y objetos relacionados con el pasado militar y el presente universitario, muchas de ellas aportadas por los propios protagonistas.

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