Más de 1.300 personas se presentan a las 45 plazas del Plan de Empleo Social

Esa es al menos la previsión, puesto que el alcalde, Fernando Pizarro, volvió ayer a arrojar una sombra de duda sobre la capacidad del Ayuntamiento de llevar acabo esta selección en los plazos establecidos en el decreto de la Junta, con el que se ha mostrado muy crítico desde el principio. «Haremos todo lo posible», afirmó, y volvió a insistir en que, a su juicio, el objetivo que tiene el ejecutivo de Fernández Vara con este plan es «quitarse la carga de perceptores de cuentas básicas», ya que ellos son la única excepción que se establece en el decreto al requisito de no estar cobrando ninguna prestación para poder presentarse.

El otro imprescindible es ser parado de larga duración, y a partir de ahí aparecen una serie de condicionantes sociales para baremar las solicitudes, tales como discapacidad, nivel de ingresos, cargas familiares, violencia de género, ser familia monoparental o la adecuación al puesto de trabajo. También en este punto Fernando Pizarro mostró algunas reservas, puesto que en su opinión resultará difícil respetar los principios de «transparencia y justicia» cuando el área de pesonal y el de servicios sociales van a tener que baremar más de 1.300 solicitudes en muy pocos días, concretamente entre el 21 y el 29 de diciembre, para que los contratos se puedan firmar entre el 30 y el 31.

Las 45 plazas que ha sacado el Ayuntamiento con cargo al Plan de Empleo Social en esta primera fase son 20 de limpiador, 11 de operario de servicios múltiples, 10 de operario de brigada verde, dos de ordenanza, una de operario de cementerio y una de conductor de grúa. Todos ellos serán contratos de seis meses de duración y retribuidos de acuerdo a las tablas del convenio colectivo. La Junta de Extremadura financia cada puesto con 6.000 euros y el resto hasta el total del salario lo pone el Ayuntamiento. Según el alcalde, eso le va a suponer a las arcas municipales un coste de más de 400.000 euros, que irán consignados en los presupuestos de 2016.

El total de puestos de trabajo asignados a Plasencia en este plan es de 90, de los cuales 45 se contratan ahora y los otros 45 antes del 30 de junio del próximo año. El gobierno local ya ha anunciado que su intención es aprovechar la subvención completa, para lo cual tendrá que sacar el total de las plazas.

Aun siendo 1.300 un número muy elevado de solicitantes, Fernando Pizarro dijo ayer que son menos de los que esperaban cuando decidieron sacar adelante el plan. «Es posible que mucha gente no se haya enterado precisamente por la premura con las que se ha hecho», apuntó. Avisó además de que si hay quejas por la manera en la que se haga la baremación en tan pocos días «la culpa la tienen la consejera de empleo y el presidente de la Junta».