Borrar
Fernando González, representante del artista Carlos Castañeda, con uno de los grabados. :: a. méndez
Cuando la muerte  se hace arte
exposiciones

Cuando la muerte se hace arte

El mexicano Carlos Castañeda expone sus impactantes grabados en el Palacio de la Isla, como continuación de la Bienal de Obra Gráfica | En su país, México, la muerte, por cultura y por la violencia que se ensaña en determinadas zonas, es un concepto muy presente en la vida de las personas

Pablo Calvo

Lunes, 14 de julio 2014, 08:18

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Si hay material sensible con el que trabajar, ese es la muerte. Lo sabe Carlos Castañeda, capaz de convertir en arte el momento en el que una persona se va, o ya se ha ido. En su país, México, la muerte, por cultura y por la violencia que se ensaña en determinadas zonas, es un concepto muy presente en la vida de las personas, y el artista mexicano, reconocido con una mención honorífica en la última edición de la Bienal Iberoamericana de Obra Gráfica de Cáceres, intenta redimir ese trance a través del grabado. «Un artista joven, pero que ya es reconocido a nivel internacional», asegura Rosa Perales, comisaria de la Bienal desde sus inicios hace una década y que destaca el modo en que el artista de Aguascalientes es capaz de convertir en arte un tema duro.

DATOS

  • Exposición 'El dolor que nos redime'. 22 obras realizadas con técnicas clásicas de grabado.

  • Artista Carlos Castañeda, mexicano de Aguascalientes, mención honorífica en la V Bienal Iberoamericana de Obra Gráfica de Cáceres.

  • Dónde En el Palacio de la Isla, en la plaza de la Concepción.

  • Fechas Hasta el próximo 31 de julio.

El resultado se puede ver durante este mes de julio en las salas de Palacio de la Isla, 22 obras, entre ellas 'Carne de tu carne' por la que fue premiado en Cáceres, realizadas con las técnicas tradicionales del grabado, «aguafuerte, aguatinta, las mismas técnicas que se vienen utilizando desde Durero, Rembrandt..., aplicados al tema de la muerte, un asunto fuerte», explica Fernando González Villarreal, representante de Castañeda, quien se ha ocupado junto a Perales de instalar la muestra en Cáceres como actividad complementaria a la propia Bienal.

Los cuerpos y los rostros, que impactan al visitante, fueron encontrados en fosas comunes y destinados en algunos casos al estudio por parte de estudiantes universitarios. «Son cuerpos no reclamados, no se sabe muy bien cómo terminaron sus días, pero es una manera también de rendirles homenajes a estas personas que nos llegan sin nombre conocido, pero al que el grabado le da una identidad nueva, al menos artística», añade Fernando.

La exposición se llama 'El dolor que nos redime'. «Es una manera de homenajear a unas personas marcadas por la tragedia, pero que se redimen en este último suspiro».

Castañeda se ha propuesto «dignificar» estos muertos anónimos, que adquieren personalidad y recorrido en sus grabados de gran formato, que llegan a intimidar al espectador, que sin embargo, no puede dejar de observarlos.

«Carlos», asegura su representante con un grabado entre las manos, «retoma un poco las imágenes que aparecen en los periódicos sensacionalistas, amarillistas, existentes en México, un tipo de prensa que cada fin de semana te muestra en un kiosco los cadáveres mutilados, cuestiones sangrientas... él retoma esas imágenes para darles una sensibilidad más humana. De esta forma, estas personas no quedan como una estadística más. La mirada del espectador transforma la imagen».

El propio Castañeda lo ha explicado así. «Cuando observé el primer cuerpo tendido, sin vida, analicé un poder plástico que podía llevar al grabado, dibujo o a la fotografía. Llevo siete años trabajando con el tema, tomando imágenes de los cadáveres». El resultado está a la vista.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios