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Giro en Cataluña

La ventaja del no a la secesión en los sondeos debería instar a la reflexión a Artur Mas y a las fuerzas soberanistas

PPLL

Sábado, 20 de diciembre 2014, 00:37

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El último sondeo del Centro de Estudios de Opinión de Cataluña indica que el no al independentismo vence en el Principado por primera vez desde que Artur Mas lanzó el proceso soberanista en 2012. La diferencia es mínima, 45,3% frente al 44,5%, pero si se suma a quienes optan por que Cataluña sea un Estado dentro de una España federal (28,9%), quienes prefieren el modelo actual (21,8%) y quienes consideran que es una región de España (5,4%), se llega a la conclusión de que son bastantes más (56,1%) quienes no desean la independencia frente a los independentistas (36,2%). Varios análisis publicados en los últimos meses llegan a la conclusión de que el independentismo necesitaría entre 300.000 y 400.000 votantes más para imponerse. Con la particularidad de que existe consenso entre politólogos y constitucionalistas -en línea con el célebre dictamen del Tribunal Supremo de Canadá sobre Québec de agosto de 1998- sobre la evidencia de que para instar la secesión de un territorio es preciso disponer de una 'clara mayoría', es decir, de una mayoría muy cualificada, que se pronuncie 'de forma inequívoca'. Así las cosas, es evidente que aunque Cataluña ha cultivado el vector independentista con mucho más énfasis que Euskadi -según el Euskobarómetro 2014, sólo el 22% de los ciudadanos declara ser independentista-, no existe masa crítica suficiente para plantear una secesión, por más que los independentistas sean más activos que quienes se conforman con el estatu quo o quieren simplemente reformarlo. La referida encuesta analiza también la previsión de voto en las elecciones catalanas con un empate técnico entre CiU y ERC, y a continuación se ubica Ciutadans, por delante del PSC, PPV, Podemos/Podem e ICV-EUiA y la CUP. En cambio, en unas hipotéticas elecciones generales, y en términos de intención directa de voto, Podemos se sitúa en primer lugar (14,7%) -el Euskabarómetro situó ayer a Pablo Iglesias como el líder más valorado-, seguida por ERC (11,9%) y por CiU (11,2%). Estos datos deberían provocar una profunda reflexión de las fuerzas soberanistas catalanas y en especial del presidente de la Generalitat, Artur Mas. No parece que su mesiánico proyecto y su ambicionada lista única estén moviendo las voluntades que esperaba para llevarlos a cabo.

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