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¿Qué ha pasado hoy, 17 de abril, en Extremadura?
El periodista Graciano Palomo.
«Arriola cree que Podemos no sabe gestionar ni una mercería»

«Arriola cree que Podemos no sabe gestionar ni una mercería»

El periodista Graciano Palomo desentraña en su nuevo libro, ‘Pedro Arriola, el Brujo’, los secretos del gurú del centro derecha que llevó a la Moncloa a Aznar y Rajoy

Álvaro Soto

Sábado, 15 de noviembre 2014, 08:14

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A Pedro Arriola muchos lo conocieron el pasado 26 de mayo, un día después de las elecciones europeas, cuando calificó como frikis a los miembros de Podemos, que lograron la noche anterior un espectacular resultado con cinco eurodiputados. Hasta ese momento, el nombre de este sociólogo apenas resultaba familiar para el gran público, pero sí, y mucho, para todos los que estuvieran en la pomada del centro-derecha español. Para ellos, Pedro Arriola era el brujo que había llevado a dos candidatos del PP, José María Aznar y Mariano Rajoy, a la Moncloa. Y precisamente ese apodo utiliza el periodista Graciano Palomo para titular su nuevo libro, Pedro Arriola, el Brujo, un recorrido por la trayectoria de este gurú que el autor compara en varias ocasiones con Rasputín, el hombre más influyente en la dinastía rusa de los Romanov. Pero Rasputín acabó fusilado en Siberia y no será el caso, explica Palomo.

Arriola se arrepiente de haber dicho que Podemos eran unos frikis, cuenta Graciano Palomo, que intenta explicar por qué el sociólogo pronunció estas polémicas palabras: Era el día después de las elecciones europeas y no había sido capaz de detectar en toda su entidad el fenómeno Podemos. Trataba de justificarse. Pero la expansión del partido de Pablo Iglesias, continúa Palomo, ha afianzado a Arriola en su idea de que el sistema se está autodestruyendo, lo que da a oportunidades a los extremos, pero esos extremos no van a durar porque en cuanto gestionen una mercería, todo se cae, no tienen experiencia. Esto es lo que piensa Arriola.

Sostiene Palomo con el aval de la historia que ningún caso en el mundo libre es comparable al de Arriola, un asesor capaz de convertir a dos "clientes" (así denomina a sus asesorados) en presidentes del Gobierno. ¿Hubieran logrado sentar sus reales en la Moncloa sin su ayuda? Son dos casos diferentes. Aznar difícilmente podría haber sido presidente sin Arriola. Se lo prestó José María Cuevas (presidente de la CEOE) porque quería impulsar la carrera de Aznar. Rajoy, al principio, pensó en sustituirlo, pero a partir de 2008 se entregó en cuerpo y alma a él. Arriola le hace echar a los corbatas negras, Acebes y Zaplana, vinculados a la gestión del 11-M, y le recomienda profundizar en la centralidad, que es donde podía conseguir los tres o cuatro millones de votos que le hacían falta al PP para ser mayoría. Y acertó. Él le dice a Rajoy que será presidente del Gobierno antes del 2012, y lo fue el 20 de noviembre del 2011.

Sin embargo, Arriola también ha cometido importantes errores en su carrera, como recuerda Graciano Palomo. Se equivocó en 1993, en algunos planteamientos en los debates entre Felipe y Aznar Él parte de una base, siguiendo al filósofo Vilfredo Pareto: la oposición nunca gana las elecciones, son los gobiernos las que las pierden.

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