La mula abandonada encuentra un posible hogar en Valencia de Alcántara

Su marido, también procedente del país germano, es ganadero y ella podóloga equina, naturoterapeuta para animales y domadora de mulos con más de veinte años de experiencia en su país. «Visitábamos mucho Extremadura y Andalucía en vacaciones, hasta que un día decidimos que Valencia de Alcántara era nuestro hogar», recalcó. Desde que tomaron su decisión han vivido rodeados de naturaleza y cinco mulos.

«Nos encantan estos animales. Ahora mismo estamos adiestrando a uno de ellos que pertenece a una amiga mía de Alemania», recalcó. Entre sus mulos, también hay uno con 38 años de edad. «Si no encuentra un hogar la mula abandonada nos encantaría encargarnos de ella y que se sume a nuestro pequeño rebaño», destacó la alemana.

En cuanto al posible traslado del animal, Schneider señaló que al no disponer de chip ni pasaporte la situación se complica. Pero ya ha pensando en una posible solución. «Podríamos ponernos en contacto con protectoras o el refugio de Zafra y su veterinario para que atienda a la mula y podamos trasladarla», apuntó.

De todas formas esa opción tendrá que esperar. Para sus cuidadores el futuro de la bestia es negro. «El animal está cada vez peor», indicó Pedro Sánchez. El emeritense, junto a su padre, estuvo toda la tarde de ayer junto al animal refrescándolo para que aguantara el fuerte calor. «La mula está ya tumbada, se mueve poco y las altas temperaturas de los próximos días se lo van a poner muy difícil», apuntó Sánchez.

Schneider ya se ha puesto en contacto con los cuidadores y estará pendiente de la evolución del animal por si mejora poder darle un hogar.