El puente de mayo traerá el segundo lleno hotelero en poco más de un mes

En el Hotel Mérida Palace, por ejemplo, confirman que esperan llegar al cien por cien en la noche del sábado y del domingo, lo mismo que en el Adealba, Vettonia o Las Lomas. En los tres establecimientos repiten perfil. Huéspedes de comunidades cercanas, que viajan en familia, muchos con la reserva desde marzo y pasan por Mérida en ruta por Extremadura.

En lo que se refiere a los precios, en las distintas plataformas digitales especializadas que permiten cerrar la compra, se ofertan habitaciones dobles sin desayuno en torno a los cien euros para el sábado treinta de abril. La horquilla se mueve entre los 96 y los 126.

En los apartamentos turísticos, una oferta creciente en la ciudad, tampoco resulta fácil encontrar hueco para ese fin de semana.

El sector turístico vivirá, por tanto, el segundo lleno en poco más de un mes y los planes de negocio pasan por superar los 3.123 viajeros del puente de mayo de 2015 (según los datos del Observatorio de Turismo de Extremadura). Entonces hubo 4.846 pernoctaciones, un 69% de ocupación y 1,55 días de estancia en la ciudad.

En la asociación de hoteleros de la ciudad insisten en que el 2016 mantiene la tendencia al alza y cada vez se acercan más a números precrisis, por lo que no será complicado superar esta cifra. El siguiente escalón pasa por recuperar márgenes de ganancia perdidos por la caída de precios y conseguir que los viajeros pasen más de dos noches en Mérida, algo que no se da en ningún puente del año y que tiene más que ver con la oferta real de Mérida que con la capacidad de gasto del viajero.

Desde los hoteles explican que las cifras finales tanto de ocupación como de pernoctaciones dependerá también del tiempo.

Las previsiones meteorológicas determinarán el reparto entre el turismo de playa y el de interior. Esta variable ha sido clave, por ejemplo, para tener la mejor Semana Santa en diez años en algunos destinos como Mérida porque cayó en los primeros días de primavera y con temperaturas que no invitaban todavía a visitar la costa.

Los puentes se organizan a última hora, por eso el volumen de reservas cerradas a estas alturas permite ser optimistas.