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El expresidente colombiano Álvaro Uribe.
Uribe prefiere «paz para todos» en Colombia antes que un «acuerdo débil»

Uribe prefiere «paz para todos» en Colombia antes que un «acuerdo débil»

El exmandatario ha declarado que en su reunión con Juan Manuel Santos se han manifestado "ajustes y proposiciones iniciales, que deberán introducirse a los textos de La Habana para buscar un nuevo acuerdo"

colpisa / afp

Miércoles, 5 de octubre 2016, 00:05

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El expresidente Álvaro Uribe, líder de la oposición en Colombia a los diálogos de paz con las FARC, ha abogado este miércoles por una "paz para todos" antes que "un acuerdo débil", tras reunirse con su sucesor, Juan Manuel Santos, impulsor del pacto con la guerrilla rechazado en un plebiscito el pasado domingo.

"Es mejor la paz para todos los colombianos que un acuerdo débil para la mitad de los ciudadanos", ha dicho Uribe, actual senador y gran triunfador de la votación que por 50,21% no aprobó lo negociado por Santos con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC, marxistas) durante casi cuatro años en Cuba.

El exmandatario ha declarado a los periodistas que en la reunión con el jefe de Estado se han manifestado "ajustes y proposiciones iniciales, que deberán introducirse a los textos de La Habana para buscar un nuevo acuerdo de paz, que vincule a la totalidad de los colombianos".

Las FARC piden a sus filas moverse a posiciones seguras

  • El número tres de las FARC, Félix Antonio Muñoz, alias 'Pastor Alape', ha pedido este miércoles a los integrantes de esa guerrilla que empiecen a movilizarse hacia "posiciones seguras para evitar provocaciones" en medio del limbo en el que quedó el acuerdo de paz tras imponerse el no en el plebiscito del domingo. "Todas nuestras unidades deben empezar a moverse a posiciones seguras para evitar provocaciones", ha escrito 'Alape' en su cuenta de Twitter.

  • El líder de las FARC se pronunció así poco después de que el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, dijera que el alto el fuego con esa organización guerrillera, en vigor desde el 29 de agosto, se mantendrá hasta el 31 de octubre, a la espera de los consensos a los que se puede llegar mediante el diálogo que ha promovido tras el resultado obtenido en las urnas. "Alape" subrayó con una etiqueta que "la paz no se detiene".

Entre ellos, ha mencionado "la necesidad" de que el grupo rebelde "cese todos los delitos" y que el gobierno garantice la seguridad de sus miembros, y pidió por "soluciones" jurídicas "inmediatas" para los guerrilleros rasos no vinculados con delitos de lesa humanidad.

También ha solicitado un "alivio judicial, sin impunidad", para los integrantes de la fuerza pública señalados de cometer crímenes durante el conflicto armado de más de medio siglo.

Y ha reiterado sus "preocupaciones" por otorgar "impunidad total" y "elegibilidad política" de guerrilleros responsables de delitos atroces.

"El resultado del domingo rechazó los acuerdos pero reafirmó el deseo unánime de paz", ha agregado Uribe, quien ha pedido acompañamiento a las Naciones Unidas y "comprensión y apoyo" a la comunidad internacional en este proceso.

Tras la victoria del 'No' el domingo, los diálogos entre los distintos sectores políticos del país en pos de la paz deben conducirse "con ausencia de violencia".

Santos, optimista

Por su parte, Juan Manuel Santos, artífice del acuerdo de paz con las FARC, se ha mostrado optimista sobre la proximidad del final de un conflicto de medio siglo, tras reunirse con la oposición ganadora del plebiscito que rechazó el pacto con esa guerrilla.

"La paz de Colombia está cerca y la vamos a alcanzar", ha enfatizado el mandatario en una alocución televisada desde la sede presidencial tras la esperada reunión con su predecesor, Álvaro Uribe, feroz opositor a los diálogos con las FARC.

Decidido a "buscar caminos para la unión y la reconciliación", después de que el país quedara polarizado entre el 50,21% que votó contra el acuerdo y el 49,78% que lo respaldó, Santos ha agradecido a Uribe y al también expresidente Andrés Pastrana, principales promotores del 'No', su "buena disposición" para salvaguardar el proceso de paz.

"Con los partidarios del 'No' identificamos que muchas de sus preocupaciones están en puntos que requieren aclaraciones o precisiones. Hoy mismo empezamos a trabajar con ellos para concretar esos puntos y resolver sus inquietudes", ha dicho el presidente sobre lo sellado el 26 de septiembre con las FARC tras casi cuatro años de negociaciones en Cuba.

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