Borrar
La primera bronca de palacio

La primera bronca de palacio

Urdangarin habló de su boda cuando no debía, Hugo Sánchez solo posaba por su lado bueno y Beckham regalaba flores... Un grupo de periodistas relata sus anécdotas con deportistas famosos

ESTER REQUENA

Miércoles, 25 de noviembre 2015, 07:43

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Corría el año 1997 cuando Iñaki Urdangarin estaba a punto de pasar por el altar con la Infanta Cristina. Seguía siendo un jugador profesional y se debía a sus compromisos deportivos. Le tocaba jugar con la selección española de balonmano el Mundial de Japón, pero tenía prohibidísimo desde la Casa Real hablar sobre el enlace. Hasta que un periodista logró tirarle de la lengua. La entrevista era para la sección de deportes, pero Urdangarin acabó largando de sus sentimientos, de lo que le había cambiado la vida al emparentar con los Reyes y de la ilusión que le hacía dar el 'sí, quiero', de ahí que sus palabras acabaran, y con titulares bien grandes, en las páginas de sociedad. «Tío, la que me has liado. En Zarzuela me han echado una bronca de órdago», le espetó al plumilla en cuanto se lo volvió a encontrar.

El primer tirón de orejas palaciego al ahora exduque de Palma forma parte del libro 'Las estrellas son así' (Espasa), donde 101 periodistas relatan sus anécdotas con deportistas nacionales e internacionales en los últimos cuarenta años. No falta la selección española de fútbol, que 'perdió' la Copa del Mundo ganada en Sudáfrica durante las celebraciones en Madrid. Al día siguiente nadie encontraba el trofeo, hasta que apareció en casa del director de comunicación, Antonio Bustillo. «Nadie quería llevársela y ha dormido con mi mujer y conmigo», soltó ante el alivio de Vicente del Bosque y Ángel María Villar.

El equipo de baloncesto también ocupa bastantes páginas. Como cuando se quedaron sin luz en plena celebración del Eurobasket 2015. «Han sido los franceses, han sido los franceses», cantaban los jugadores a oscuras, mientras los fotógrafos intentaban captarlos junto a las autoridades usando las linternas de sus móviles. El resultado: ninguno sale mirando a cámara. Unos años antes, también en un Eurobasket celebrado en Francia, la jugadora Amaya Valdemoro vivió su particular pesadilla al comprobar que sus dos zapatillas eran del pie izquierdo. El jefe de prensa de la federación se plantó entonces en el país vecino con un par en condiciones, pero viendo lo que se jugaba con el encargo «ni las facturé ni las perdí de vista un segundo en el avión». Al final, consiguieron proclamarse campeonas de Europa.

A lo pescador

Más control sobre todos los aspectos de su carrera deportiva ejercía el futbolista mexicano Hugo Sánchez. Medía y preparaba perfectamente hasta sus entrevistas televisivas. «Vírate, porque si me toman desde allí, me sacarán mi lado malo y no me interesa», soltaba al entrevistador. Todo un discípulo aventajado de Julio Iglesias.

Aunque si alguien cuida su imagen, ese es David Beckham. El inglés apareció en una entrevista en un restaurante madrileño cargado con sus suegros y su mujer. Por las molestias ocasionadas, unos días más tarde las tres periodistas recibieron un ramo de 23 rosas blancas (su número en el Real Madrid), productos de perfumería de las marcas del matrimonio y una nota a mano. Sin tanto glamour recibía Santiago Bernabéu en su casa a los plumillas. Vestido como un pescador cortaba el embutido con navaja. Ya se sabe: las estrellas son así...

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios