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¿Qué ha pasado hoy, 28 de marzo, en Extremadura?
La EPA del segundo trimestre de 2017 cifra en 128.937 el número de parados en Extremadura. :: arnelas
El subsidio agrario mantiene a la región como la segunda con más prestaciones

El subsidio agrario mantiene a la región como la segunda con más prestaciones

El gobierno autonómico lo achaca a la reducción del desempleo y a la «apuesta política contra la exclusión social»

CLAUDIO MATEOS

PLASENCIA.

Lunes, 21 de agosto 2017, 00:44

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La Junta de Extremadura anunció hace unos días un nuevo Plan de Empleo Social con criterios de acceso menos restrictivos con el argumento de que la realidad de las familias ha cambiado en estos últimos años. Concretamente, aportó el dato de que desde junio de 2015 hasta el mismo mes de 2016 la tasa de personas desempleadas que no reciben ningún tipo de prestación ha bajado en Extremadura del 45% al 34%. La clave hay que buscarla en el subsidio agrario.

Esa estadística implica que dos de cada tres desempleados extremeños perciben algún tipo de prestación, muy por encima de la media nacional, que es de aproximadamente el 50%. El dato es aún mejor si se toma la Encuesta de Población Activa (EPA) del primer trimestre de 2017, que elevaba a un 75% la tasa de perceptores de prestaciones en Extremadura, sólo superada en España por el 93% de Baleares.

LAS CIFRAS

  • La Encuesta de Población Activa del segundo trimestre de 2017 da para Extremadura la cifra de 128 937 desempleados (25,76%).

  • Uno de cada tres parados extremeños no reciben algún tipo de prestación Según la Junta, es un 11% menos que hace dos años.

La directora general de Empleo, Inés Carreras, achaca este incremento de la tasa de personas con prestaciones, por un lado, a la bajada del paro, y por otro a la «apuesta política por lo que hemos llamado muro de contención contra la exclusión social». Los sindicatos, sin embargo, avisan de que el dato tiene truco. Comisiones Obreras recuerda en su último informe trimestral sobre el mercado laboral que Andalucía y Extremadura, dos de las cuatro comunidades con prestaciones por encima de la media, son las dos únicas que cuentan con el subsidio para eventuales agrarios, lo cual influye decisivamente en las estadísticas. También le sacan un pero al primer lugar que ocupa Baleares, y es que se trata de una región con muchos empleados fijos discontinuos por el turismo, que en el cálculo de la tasa cuentan como beneficiarios pero no como desempleados.

Con carácter general, este indicador de cobertura de prestaciones se calcula dividiendo el total de personas que perciben ayudas entre el número de desempleados más los beneficiarios del subsidio agrario. Se trata de una fórmula polémica que hay que matizar con numerosos asteriscos, ya que, por ejemplo, en el total de quienes perciben prestaciones se incluye también, entre otros, a aquellos que las compatibilizan con contratos a tiempo parcial, y a los prejubilados en los ERE. Además, entre los parados sólo cuentan los que hayan trabajado alguna vez con anterioridad, pero no lo demandantes de primer empleo.

Por eso hay sindicatos, como CC. OO, que en lugar de la tasa de cobertura por desempleo que calcula el SEPE prefieren usar lo que llaman 'tasa de protección por paro', la cual se obtiene al dividir el total de parados que perciben prestaciones entre el total de parados según la EPA, sin excluir a ningún tipo de desempleado. Al hacerlo, el número de parados con prestaciones se reduce más o menos a la mitad de los que salen con la tasa del SEPE, lo cual para este sindicato sería bastante más ajustado a la realidad.

En todo caso, la directora general de empleo pone el acento en el descenso del número de parados que se ha registrado en los dos últimos años. Recuerda en ese sentido que la EPA del segundo trimestre de 2015 arrojaba la cifra de 149.052 desempleados, mientras que la del mismo periodo de 2017 ha dado 128.937. Eso supone, en términos porcentuales, pasar de un 29,56% a un 25,76% de paro. Inés Carreras insiste en que ahí reside buena parte de la explicación de que haya bajado el número de extremeños sin empleo que no perciben ninguna prestación.

Carreras señala que en los dos años que lleva en marcha el Plan de Empleo Social han sido contratadas a su cargo cerca de 8.000 personas por parte de los ayuntamientos extremeños, y en algunos casos también por empresas privadas. En el ya anunciado para 2008 uno de los objetivos es que puedan beneficiarse personas que hasta ahora no lo hayan hecho, y de ahí que se introduzcan cambios para que sea menos restrictivo, entre ellos tomar como referencia el salario mínimo (707 euros) en lugar del Iprem (532).

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