Borrar

El corazón de Europa late hoy en Yuste

El acto de entrega del Premio Carlos V a Antonio Tajani, presidente del Parlamento Europeo, es una ventana desde donde Extremadura se asoma a Europa y, al revés, desde donde Europa nos contempla

guillermo fernández vara

Martes, 8 de mayo 2018, 23:30

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

A mediados del siglo pasado, Europa atravesaba el desgarro de una cruenta guerra sobre cuya experiencia se cimentaron los pilares de un nuevo futuro. En ese difícil contexto, Robert Schuman atesoró la esperanza de unir a los europeos después de décadas de separación y conflictos. Los europeos asumieron así su responsabilidad y Europa se creó como respuesta de paz, de democracia y de unidad dentro de la diversidad.

Bajo esa idea, la de reconocer a personas, organizaciones, proyectos e iniciativas que han contribuido al engrandecimiento de los valores culturales e históricos de Europa y al proceso de integración de la Unión Europea, la Fundación Academia Europea e Iberoamericana de Yuste instituyó el Premio Europeo Carlos V.

No olvidemos que es esa parte del norte extremeño uno de los lugares que forman parte de la memoria y la historia europea, al ser el enclave donde el emperador avanzó hace siglos la idea de una Europa unida.

Así, coincidiendo con la fecha del 9 de mayo en la que Schuman propuso por primera vez un proyecto de integración europea, Extremadura se convierte en el corazón de Europa. Ese día, Yuste acoge uno de los actos más importantes que se celebran en el continente, y, sin duda, el más relevante que se celebra en España al ser un acto de Estado que cuenta con la presencia de Su Majestad Felipe VI, quien este año además ostenta por primera vez la Presidencia de Honor de la Fundación Academia Europea e Iberoamericana de Yuste.

En esta edición, el galardonado con el XII Premio Europeo Carlos V es un gran europeísta, Antonio Tajani, presidente del Parlamento Europeo. Un premio que recibe por una carrera política de casi 25 años dedicada a la Unión Europea y a sus instituciones como garantes de la paz, la democracia, los derechos humanos, la igualdad, la solidaridad y los valores que representa.

Esta distinción es también un reconocimiento a las instituciones europeas, las mismas que tienen que afanarse para poner en el centro de su acción a los ciudadanos, para que los europeos se vuelvan a ilusionar con Europa.

Las instituciones tienen que trabajar para que frente a totalitarismos haya más democracia; frente a muros se construyan puentes; frente a fronteras haya más integración y más inclusión; para que brote más europeísmo frente a populismos euroescépticos, en definitiva, que haya más y mejor Europa.

Una Europa que ha supuesto un camino común de progreso, crecimiento económico y desarrollo social para Extremadura, pero que sin duda, marcó también el inicio de un nuevo tiempo para esta región que ahora cumple 35 años de autonomía.

El ingreso de España en la Unión Europea supuso el camino para modernizar no sólo nuestra región, sino también nuestras potencialidades y fortalezas. Extremadura es un gran ejemplo de lo que supuso, supone y supondrá la pertenencia a esta unión, y de cómo la Política Regional y los Fondos Europeos han ayudado a modificar la fisionomía de nuestra sociedad y nuestra economía.

En este viaje compartido, también Extremadura ha intentado contribuir a Europa aportando una importante visión de Iberoamérica al proyecto europeo, sobre todo gracias a nuestras respectivas conexiones históricas, empresariales y humanas con ambos mundos.

Por ello, este año la ceremonia del premio es una puesta de largo para la Fundación Academia Europea e Iberoamericana de Yuste. La labor de esta fundación se despliega a lo largo de todo el año con el propósito de seguir trabajando para construir Europa desde la reflexión, el debate sosegado y constructivo con las aportaciones de los ilustres académicos, así como desde las inquietudes y propuestas de los jóvenes europeos que conforman la Red Alumni y de todos aquellos que, año tras año, nos enriquecen con su participación en Campus Yuste.

Para muchos, la entrada de España en la Comunidad Económica Europea supuso el fin de la Transición, los españoles cogíamos el tren de las oportunidades. Desde entonces, Europa ha sido fiel compañera en el desarrollo de esta tierra: infraestructuras viarias, culturales, deportivas, proyectos de toda índole o ayudas agrarias han sido fundamentales para el crecimiento de esta comunidad. Por esto, desde Extremadura queremos seguir trabajando de manera transversal por el proyecto europeo.

El acto de entrega del Premio Europeo Carlos V es también una ventana desde donde Extremadura se asoma a Europa y, al revés, desde donde Europa nos contempla. Extremadura, a través de la Fundación Academia Europea e Iberoamericana de Yuste, pone a disposición de todos una herramienta para el diálogo, la reflexión y el estudio de la realidad euro-iberoamericana, porque esta sociedad que se reinventa y se desmorona, se crea y se cuestiona, necesita de lugares para el debate y el análisis.

Europa aprendió de su pasado para hilvanarse su presente y su futuro quizás haciendo suyas las palabras del filósofo y teólogo danés Sören Kierkegaard, cuando dijo que «la vida sólo puede ser comprendida hacia atrás, pero únicamente puede ser vivida hacia delante».

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios