154 interinos reclaman en el juzgado convertirse en indefinidos

«El objetivo, claramente, es que estabilicen su situación laboral y no pierdan su puesto de trabajo», señala Manuel Martos. Explica que, siendo interinos, pueden ser cesados de un día para otro. «Una situación que nada tiene que ver si su vínculo con la administración es como personal indefinido no fijo, porque mientras exista trabajo en la plaza que ocupan o en otra tienen que seguir contratados y porque, además, en el caso de que ese trabajo desaparezca pueden ser despedidos, claro, pero tienen que ser indemnizados».

Ha sido a comienzos de este verano cuando la Asociación Nacional de Interinos y Laborales presentó de forma global las reclamaciones tanto a la Diputación de Badajoz como al SES. Antes, había planteado la misma petición al órgano autónomo. «Y en este primer caso el silencio administrativo fue su respuesta; por eso, transcurrido un mes presentamos recurso en vía judicial, ya se ha celebrado el juicio y estamos esperando la sentencia», confirma el letrado. «Por eso entiendo que el SES está esperando ese fallo para tomar una decisión con respecto a las reclamaciones que he presentado después, de trabajadores del Hospital Tierra de Barros y del Infanta Cristina», agrega.

Sin embargo, Manuel Martos no ha esperado a conocer esta primera sentencia. «Las reclamaciones las presentamos el 22 de julio y, transcurrido un mes, como ya ha ocurrido, tenemos un plazo de dos para ir al juzgado, algo que ya hemos hecho, por lo que habrá nuevos juicios».

En el caso de la Diputación de Badajoz la situación se repite. No hay respuesta a la reclamación planteada y, con los plazos legales establecidos, las reclamaciones ya son demandas judiciales. En unos y otros casos, la petición es la misma: que los bomberos interinos pasen a ser indefinidos no fijos.

«Porque en todos y cada uno de los casos personales que se recogen en esas reclamaciones, todos estos empleados llevan más de tres años y un día trabajando para la administración de forma continua, por lo que seguir como interinos es una contratación fraudulenta», argumenta. «El Estatuto Básico del Empleado Público lo deja muy claro».

Lo cierto es que, según las reclamaciones presentadas por la Asociación Nacional de Interinos, que al no ser contestadas en vía administrativa se han convertido en demandas judiciales, los trabajadores que las protagonizan, pertenecientes a la Diputación de Badajoz y al SES, han superado con creces los tres años y un día. Los más antiguos tienen contratos desde 1981 y los más recientes desde 2012.

Las demandas de los interinos extremeños se suman a las más de mil planteadas por la asociación que preside Manuel Martos en juzgados dispersos por todo el territorio nacional. «Porque las leyes están para cumplirlas y las administraciones se olvidan de ello».

No son los únicos escritos judiciales que ha presentado Martos. La Diputación de Badajoz cesó ayer a siete bomberos interinos de los 73 que hay repartidos por diferentes parques pacenses. «Por eso hoy (por ayer) ya estoy presentando también demandas por estos ceses, por vulneración de derechos fundamentales, porque los están cesando después de que hemos pedido que se estabilicen sus puestos de trabajo, que dejen de ser interinos y pasen a ser indefinidos no fijos».

Además, el abogado también adelanta que ha impugnado el concurso de traslados que se ha producido previo a los ceses. De hecho, estos han empezado al día siguiente de que se hiciera pública en el BOP la resolución del concurso de traslados. «Lo he impugnado porque es ilegal, no se ha hecho pública la relación de plazas que salían a concurso», señala Manuel Martos.

La Diputación de Badajoz, por su parte, no se pronuncia sobre los ceses, pero sí asegura que en la resolución del concurso de traslados «se ha aplicado rigurosamente la legislación extremeña y la estatal».