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REDACCIÓN
Viernes, 26 de agosto 2016, 10:47
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La organización UPA-UCE Extremadura indicó ayer que la campaña de vendimia de este año llegará con un mes de retraso y que se prevé una reducción de la cosecha de entre un 10 o un 15 por ciento respecto al año anterior.
Así, UPA-UCE Extremadura informó de que este retraso se debe a que la uva «está madurando muy lentamente y hay que esperar el momento óptimo de la calidad de este producto si se quiere sacar el máximo rendimiento y precio por el mismo».
Según destacó UPA-UCE en nota de prensa, todo esto está supeditado a las situaciones climatológicas que tengan en el periodo de recolección. Además, advirtieron que «es un año atípico en el cual los costes se han disparado», debido a las precipitaciones en primavera, que han cuadruplicado los tratamientos para paliar enfermedades como el oídio y el mildiou. A todo esto se ha sumado un verano tan caluroso en el que han proliferado «las plagas como la araña roja, polilla o el mosquito verde», contra lo que también ha sido necesario intervenir.
Por ello, desde esta organización demandaron que «el precio de la uva compense no sólo los costes, sino también el beneficio propio de la actividad vitícola», para mantener la viabilidad de las explotaciones.
Por otro lado, no ven «ningún motivo que justifique la bajada del precio de la uva, cuando en el mercado del vino el precio está sostenido y sin apenas existencias de producto en las cooperativas y bodegas.
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