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La Guardia Civil ha recuperado 120 toneladas de aceituna robada

La Guardia Civil ha recuperado 120 toneladas de aceituna robada

Los grupos Roca han recibido denuncias que estiman en 535.000 kilos el producto robado desde septiembre

Celestino J. Vinagre

Lunes, 8 de febrero 2016, 00:50

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La Guardia Civil pone cifras concretas a la oleada de robos que, en esta campaña de aceituna, padece el campo extremeño. Desde septiembre y hasta el último día de diciembre, según el instituto armado, los agentes han logrado recuperar casi una cuarta parte del producto que ha sido hurtado y denunciado. En números redondos, eso significan que más de 535.000 kilos han desaparecido de los olivares ilícitamente (la patronal agraria Apag habla del doble, de un millón de kilos) y que la Benemérita ha logrado recuperar algo más de 120.000 (también Apag cree que se han recuperado más, aunque no tiene datos). Además, en este periodo se ha detenido e investigado (imputado) a 171 personas en la comunidad.

Para ver el impacto en euros de lo robado y lo recuperado solo hace falta una simple cuenta. Si, como media, ponemos que en esta campaña se han pagado 0,50 euros/kilo a cada agricultor por su producto entregado, el robo de 535 toneladas supone una pérdida de 267.000 euros (medio millón de euros si se admite el millón de kilos robados que estima Apag). A eso hay que añadirle otro daño imposible de cifrar pero muy evidente: el destrozo de olivos durante los hurtos los deja muy tocados para producir en condiciones en campañas venideras.

De igual modo, con esa estimación de 0,50 euros/kilo de aceituna, la recuperación de 120 toneladas sustraídas supone que 60.000 euros no han ido a parar a los bolsillos de ladrones y grupos organizados e intermediarios.

La estadística oficial nace directamente del trabajo de los llamados grupos Roca (acrónimo de Robos en el Campo) de la Guardia Civil, una unidad especializada en la investigación y, en la medida de lo posible, descubrimiento de los ladrones y la incautación del producto que han robado, algo con evidentes complicaciones cuando en los últimos tiempos se ha detectado la presencia de grupos organizados para delinquir con la aceituna.

Esa unidad lleva casi tres años por los campos de la región. Es tan conocida como demandada porque es queja general de las organizaciones agrarias que son un grupo tan bien recibido como poco dotado de agentes. «Hacen una gran labor pero faltan agentes. Son insuficientes», coinciden en señalar Juan Metidieri, presidente de Apag Asaja, y Antonio Prieto, responsable de Ganadería y Olivar de UPA-UCE. Entre finales de octubre y hasta diciembre, en Extremadura estuvieron 26 agentes más de la plantilla actual para actuar contra los robos pero desde el 1 de enero ya no están. Eran 18 agentes del Grupo Rural de Seguridad de Zaragoza y con ocho de los Escuadrones de Caballería de Valdemoro (Madrid).

Actividad

En el año 2013, con la crisis en pleno apogeo, los continuos robos que ya se empezaban a atisbar en explotaciones agrícolas y casas de campo movieron al Gobierno a poner en marcha un plan. El Ministerio del Interior sacó más guardias civiles de los cuarteles para llevarlos a los campos. Creó grupos especiales centrados exclusivamente en el esclarecimiento y detención de ese tipo de delincuentes. Se les denominó 'grupos Roca', formados por medio centenar de agentes en la región.

En la provincia de Badajoz, la Guardia Civil cuenta con seis patrullas Roca y cada una de ellas está integrada por cinco agentes. En el territorio cacereño existen por ahora cuatro patrullas, aunque hay otras dos en proyecto de constitución.

«Nuestro trabajo se sustenta en la investigación sobre todo, aunque realizamos medidas de vigilancia sobre el terreno y también de inspección de puestos de compraventa, claves para el movimiento de la aceituna», resume Manuel Rubio Leal, portavoz de la Oficina Periférica de Comunicación (OPC) de la Comandancia de la Guardia Civil de Badajoz.

Vestidos de paisano, viajando en coches camuflados (esto es, no oficiales), los agentes de los Roca se recorren miles de kilómetros, cada uno en su zona de demarcación, para disponer el operativo correspondiente. Visitan naves agrícolas, cooperativas, casas de campo, puestos de compraventa...

«Me parece estupendo que inspeccionen los puestos porque ahora muchos los critican y quizás pagamos justos por pecadores. Que se diferencie quiénes tenemos todos los papeles en regla y hacemos las cosas bien y quiénes no», comenta Juan José Rodríguez, vecino de Villafranca de los Barros que en esta campaña oleícola ha abierto un puesto para comprar aceitunas en Mérida, al pie de la carretera de Valverde de Mérida. Ya hay poco trasiego de furgonetas y remolques trayendo el producto.

«En el puesto no ha entrado un solo kilo sin saber de dónde procedía y quién era el propietario de la finca. Aquí se ha ido más de uno y yo me he quedado sin los kilos que traía porque no ha aclarado su procedencia», concluye Rodríguez.

«Controlar los puestos de compraventa es una tarea cotidiana pero la actividad de los Roca no se detiene ahí y no para nunca. Los agentes están activos todos los meses del año porque aunque acabe, por ejemplo, la campaña de aceituna hay más tareas que realizar. Continuar con el seguimiento de otras campañas agrícolas o con la investigación por robos de material agrario o infraestructuras en las explotaciones o parcelas», agrega el portavoz de la OPC.

En números, la actividad de este grupo especial de la Benemérita contempla que desde septiembre hasta diciembre, en la provincia de Badajoz se han denunciado 200 infracciones penales, que son las que se consideran así cuando el daño producido (robo de productos agrícolas o material) supera los 400 euros. Además, los Roca estiman que las denuncias presentadas conllevan la sustracción de 497.440 kilos. En el lado positivo, se han recuperado 119.626 hasta finales de 2015.

La principal operación la realizó el equipo Roca asentado en Mérida. A finales de noviembre, los agentes adscritos a esa unidad lograron recuperar dos camiones cargados con 35.000 kilos cada uno y detuvieron a seis vecinos de Almendralejo por hurtos perpetrados en varios municipios de la comarca de Vegas Altas y en dos explotaciones de la capital autonómica.

Por último, el número de personas detenidas e investigadas en la provincia pacense, según la Guardia Civil, se ha cifrado en 166 en los últimos cuatro meses del año.

Mientras, la estadística de los Roca en la provincia de Cáceres centrada en la campaña de la aceituna presenta números menos destacados toda vez que el olivar no tiene un protagonismo tan acusado en el territorio cacereño. Así, las denuncias registradas suponen el robo de 37.630 kilos de aceitunas sustraídas mientras que apenas se han recuperado 450 kilos. En el periodo analizado solo fueron detenidas seis personas por este tipo de hurtos.

«Que denuncien siempre, es la consigna que lanzamos a los dueños de olivares cuando les roban. Aunque lo robado sea poco. Lo deben denunciar porque, primero, debe ser así cuando se produce un hurto y porque también nos puede aportar pistas sobre otros robos precedentes», finaliza el portavoz de la oficina de Comunicación de la Benemérita en Badajoz.

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