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Alejandro Tiana, Miguel García-Izquierdo y Roberto Iniesta
Las extremeñas que vivieron la Guerra Civil y la posguerra recibirán 300 euros al año

Las extremeñas que vivieron la Guerra Civil y la posguerra recibirán 300 euros al año

Monago anunció que la ayuda será vitalicia y llegará a 35.000 mujeres de forma directa o mediante deducción

Juan Soriano

Lunes, 8 de septiembre 2014, 00:35

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Ayuda permanente de 300 euros anuales a todas las mujeres de la región que «vivieron la guerra y la posguerra y que, con su esfuerzo y sacrificio, hicieron posible la democracia y la Extremadura de hoy». El presidente del Ejecutivo autonómico, José Antonio Monago, hizo ayer ese anuncio en el acto de entrega de las Medallas de Extremadura en Mérida. Según dijo, esta medida, que se abonará de forma directa o mediante deducción, «beneficiará a 35.000 mujeres que hoy tienen más de 75 años».

Además de la forma de pago, habrá que precisar el número de beneficiarias. El Instituto Nacional de Estadística recoge que a 1 de enero de este año vivían en la región más de 74.000 mujeres nacidas en o antes de 1939. Para conocer la comunidad de origen, hay que remontarse al Censo de Población y Viviendas del 2011. En ese momento, había más de 63.000 mujeres extremeñas con 75 o más años residiendo en la región. La Junta deberá definir por tanto qué requisitos se piden para cobrar esa ayuda vitalicia.

Monago afirmó que se trata de algo más que una medida simbólica, sino que «es una cuestión de dignidad, de justicia y de memoria histórica». En su discurso habló de una generación que vivió una época de puertas cerradas a las mujeres, sobre todo en la Extremadura rural. «La gran mayoría no pudisteis cotizar lo suficiente, muchas de vosotras nada porque no tuvisteis la oportunidad o porque no os dejaron, y eso que vuestros jornales eran de 24 horas». Pese a ello, afirmó que «junto a vuestros maridos seguís apoyando a vuestros hijos y nietos y muchas de vosotras lo hacéis además con la mitad de la pensión al fallecer vuestro esposo».

El presidente autonómico también habló de justicia al afirmar que cree en una región «que defiende lo que es suyo y lo que le pertenece», por lo que no entiende «cómo la Virgen de Guadalupe sigue sin ser extremeña». Como ya adelantó la pasada semana, se ha dirigido por carta al Papa Francisco para pedirle que la patrona forme parte de una diócesis extremeña y para invitarle a una visita oficial a la región.

Una vez más, en ocasiones se mostró como un presidente con un discurso más cercano a una formación de izquierdas que a su partido, el PP. «Nunca ha sido cierto que sea un barón rojo, pero sí lo es que mi Gobierno desarrolla políticas de izquierdas y de derechas», apuntó.

A su juicio, la fortaleza de un Gobierno no está en la mayoría absoluta, y agradeció de forma directa a Izquierda Unida por haberle permitido dirigir la Junta desde julio de 2011, con una referencia a un nuevo partido que surge por la izquierda: «vosotros pudisteis antes que otros. No dijisteis podemos, dijisteis lo hacemos». Y añadió: «gracias a ellos nunca me he sentido en minoría absoluta».

Más que por anuncios novedosos, el discurso de Monago estuvo marcado por la cita electoral del próximo mes de mayo. Aprovechó para repasar tres años de trabajo y presentar sus credenciales para un nuevo mandato al frente de la Junta.

«A pesar de todas las adversidades por las que hemos pasado, nuestra motivación ha sido tan intensa que hoy somos una referencia en toda España en políticas económicas y sociales, en política cultural y en regeneración democrática», afirmó.

Recordó el acuerdo para el cobro de la deuda histórica (aún pendiente de firma), la limitación de mandatos del presidente de la Junta a ocho años y la mejora de los datos de desempleo, pese a lo cual afirmó que «no importa cuántas veces hayamos conseguido bajar el paro, basta para que haya un solo extremeño para que cada día nos despertemos con más energía para generar condiciones de trabajo».

También aseguró que «nos encontramos con jóvenes extremeños cuyo único futuro parecía ser el empleo público; hoy, además de garantizarles a todos ellos su primer trabajo y su formación, muchos empiezan a hacerse autónomos». Asimismo, expuso que «nuestros niños son ya emprendedores desde la escuela; nuestras empresas han ampliado sus fronteras y nuestros productos llegan mucho más lejos y a más países», en alusión a los datos de exportaciones.

«Nuestros mayores, que tienen las pensiones más bajas de España, reciben hoy cada mes de enero una paga extraordinaria por el esfuerzo y trabajo que hacen y han hecho en nuestra sociedad», añadió. Se trata de una medida que anunció el pasado año en el acto de entrega de las Medallas de Extremadura, que se ha aplicado por primera vez en 2014 y que ya está comprometida para principios de 2015.

También habló de su postura en contra del IVA cultural; de una apuesta por «el campo del siglo XXI»; de más actividades y ayudas en los pueblos de la región; de la creación de la renta básica; de las ayudas a mujeres víctimas de violencia de género y del «paso definitivo hacia la igualdad por condición sexual».

Reforma electoral

A menos de un año de las elecciones, también habló de la reforma electoral que plantea el Gobierno y que tendrá su espejo en Extremadura. «No sólo estoy de acuerdo con que el alcalde sea el más votado, deberían serlo, del mismo modo, los presidentes autonómicos». A la idea de que gobierne la lista más votada (para lo que ya no serían necesarios pactos de investidura como el que se produjo entre PP e IU en 2011) añadió que se rebaje del 5 al 3% el porcentaje necesario para obtener plaza de diputado autonómico. Estas medidas formarán parte de una propuesta de reforma de ley que, según anunció Monago, se remitirá a la Asamblea y que también incluirá las listas abiertas.

Estos tres puntos ya se incluían en la modificación de la ley autonómica que planteó la Junta en febrero, y también (excepto la idea de que gobierne la lista más votada) en la propuesta que hizo el Grupo Popular en la Asamblea para crear una comisión de estudio que se cerró sin acuerdo entre los partidos del Parlamento regional. Pero en ambos casos también se contemplaba otra cuestión, de la que nada se dijo ayer: la reducción del número de diputados autonómicos de 65 a 45.

Monago cerró su intervención con una despedida que espera ser un hasta luego. «Sé que en este tiempo no hemos podido llegar a todo el mundo, pero eso no quiere decir que no sepamos cuáles son los siguientes pasos que hay que dar», afirmó. «El año que viene serán los extremeños los que decidirán si seguimos abriendo nosotros el camino cada mañana y junto a ellos. Sólo puedo deciros hoy que lo mejor está llegando».

Medallas de Extremadura

El discurso del presidente extremeño incluyó frases que forman parte de canciones de uno de los galardonados de la noche, Roberto Iniesta. El líder de Extremoduro, poco dado a las apariciones públicas y por tanto uno de los que levantó mayor expectación, aprovechó la ocasión para pedir más locales donde los jóvenes puedan dedicarse a la música, la literatura, la escultura o la pintura. Y puso como ejemplo el Palacio de Congresos de Plasencia, que a su juicio podría destinarse a promover la labor de los creadores de la región para que no tengan que emigrar.

Virtudes Carrasco, presidenta de la Asociación para la Donación de Médula Ósea (Admo), recordó los inicios de la entidad en 1996 y los logros alcanzados, como el programa de donación de sangre de cordón umbilical. Tuvo un especial recuerdo para los voluntarios y para quienes lucharon contra la enfermedad «y ya no están con nosotros».

Por parte de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (Uned), su rector, Alejandro Tiana, mostró su satisfacción por recibir la distinción y se acordó de los pioneros del centro de Mérida, y ensalzó la labor de la institución de promover la formación superior en Extremadura.

El jefe superior de la Policía Nacional en la región, Miguel García-Izquierdo, recogió el premio que distingue a la institución con un agradecimiento por la «estrecha vinculación con la sociedad a la que servimos», lo que ha permitido situar a Extremadura como la comunidad autónoma con menor tasa de criminalidad de España.

A título póstumo, se entregó el galardón a Adolfo Suárez. El presidente de la Asamblea de Extremadura, Fernando Manzano, fue el encargado de leer un mensaje de la familia Suárez, que no acudió a recoger la distinción para no restar protagonismo a la figura del expresidente del Gobierno.

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