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El ministro español de Economía, Luis de Guindos.
Guindos ve prematuro decir que España incumplirá el déficit de 2017

Guindos ve prematuro decir que España incumplirá el déficit de 2017

El titular de Economía se muestra convencido de que el crecimiento este año será superior al 2,3% del PIB previsto por Bruselas

AGENCIAS

Lunes, 20 de febrero 2017, 12:44

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El ministro de Economía español, Luis de Guindos, consideró hoy que es "muy pronto" para decir que España incumplirá su objetivo de déficit público en 2017, tal como estimó la Comisión Europea en sus últimas previsiones macroeconómicas, que apuntaban a que este sería cuatro décimas superior al objetivo.

"Es muy pronto todavía para decir que vamos a incumplir el objetivo", dijo De Guindos a su llegada a la reunión de ministros de Economía y Finanzas, el Eurogrupo, que se celebra hoy en Bruselas.

El ministro reiteró que "el objetivo del Gobierno español es cumplirlo" y se mostró "convencido de que vamos a ir hacia una convergencia hacia el 3,1%" del PIB.

En la misma línea, De Guindos consideró también muy prematuro predecir si la Comisión pedirá al Gobierno medidas adicionales de ajuste para atajar el desvío previsto. "Tenemos que esperar a ver el cierre del año 2016", pidió el ministro, que subrayó que la principal variación en las estimaciones está relacionada con las ayudas públicas a la banca, que computan de forma diferente a la hora de que Bruselas evalúe el déficit excesivo del país. "Puede haber alguna variación, pero yo espero que efectivamente se ajuste el máximo posible a lo que ha sido nuestro compromiso en 2016 y para 2017 la evolución de los ingresos tributarios está siendo positiva", dijo De Guindos.

El titular de Economía se mostró también convencido de que el crecimiento en 2017 será superior al 2,3 % del PIB previsto por Bruselas, dos décimas menor que el 2,5 % que estima el Gobierno.

De Guindos defendió que, para que el crecimiento se sitúe este año en el 2,3%, el incremento trimestral tendría que ser del 0,5%, mientras que las previsiones de la Autoridad Fiscal Independiente y del banco BBVA apuntan a que en el primer trimestre será ya del 0,8%.

La Comisión Europea publicó la semana pasada sus previsiones macroeconómicas de invierno, en las que empeoró sus perspectivas para España al estimar que el déficit público cerraría 2016 en el 4,7% del PIB y 2017 en el 3,5 %, una décima y cuatro décimas, respectivamente, por encima de las metas pactadas con Bruselas.

El pronóstico supuso también un empeoramiento con respecto a las últimas estimaciones de Bruselas, emitidas hace apenas tres semanas tras validar el borrador de presupuestos español, en las que preveía que el déficit acabaría 2016 en el 4,6 % y 2017 en el 3,3%.

De Guindos también consideró "positivos" los datos de la balanza comercial publicados hoy, que revelaron que el déficit cerró 2016 en 18.754 millones de euros, un 22,4 % menos respecto a 2015.

Estimó que esto implicará que el superávit por cuenta corriente español se sitúe en torno al 2% del PIB en 2016.

De 1 a 1,5 millones de empleos

Por otro lado, Guindos ha asegurado que si la economía sigue creciendo al ritmo del 2,5% durante tres años, "algo que es completamente posible", se podrían crear de 1 a 1,5 millones de empleos suplementarios para 2020, según dijo en una entrevista con la prensa francesa.

Eso supondría "volver al nivel de empleo de 2007", señaló De Guindos en esa entrevista publicada este lunes, entre otros, por los diarios Les Echos y Le Figaro.

El titular de Economía comentó que "antes, España era el enfermo de Europa. Ahora, a muchos de mis homólogos del Ecofin les gustaría cambiar su tasa de déficit por nuestra tasa de crecimiento". A la cuestión de si el Gobierno prepara nuevas reformas, dijo que "por ahora se trata sobre todo de mantener la dirección", como en las pensiones, donde aboga por conservar la edad de jubilación en 67 años y "un mismo nivel de prestación".

Sostuvo que el objetivo de la reforma laboral de 2012 no era bajar los salarios, recordó el descenso del paro que se ha producido desde comienzos de 2013 y consideró que "ahora, gracias a las ganancias en competitividad, los salarios pueden evolucionar de forma diferente, aunque no corresponde al Gobierno decretarlo".

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