Secciones
Servicios
Destacamos
ESTRELLA DOMEQUE DÍAZ
Domingo, 24 de junio 2018, 09:50
Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.
Compartir
Don Benito. Ganas de trabajar en un mercado laboral que tiende a cerrarles las puertas, muchas veces por el desconocimiento de sus capacidades. Esa es la situación que viven muchos de los usuarios de Plena Inclusión Don Benito, que gracias al Programa EmPlena disfrutan de una experiencia laboral con la que esperan derribar esas puertas.
«La oferta laboral es escasa para la gente con discapacidad y creo que es algo que se puede mejorar, porque somos personas que podemos realizar el mismo trabajo que otro. Tener una discapacidad no significa nada, al revés, podemos desarrollar la misma actividad y estar a la misma altura que los compañeros», explica Joaquín García, de 29 años, que este mes ha disfrutado de su primera experiencia laboral en Industrias Cárnicas D'Fiallo. Pese a que su aspiración es trabajar de cara al público, reconoce que también aceptaría otro tipo de trabajo.
A su lado, le escucha Sergio Fernández que con 27 años también ha experimentado hace unas semanas su primeros pasos en el mundo laboral, en este caso en MaxColor. «Me vuelven a decir de trabajar y aceptaría sin dudarlo, he hecho un trabajo muy variado, cada dos por tres me mandaban una cosa distinta, o era yo el que pedía que me asignaran algo», señala. Actualmente, le gustaría encontrar un trabajo como reponedor.
Con una sonrisa, mientras monta artículos de papelería, Elizabeth Expósito espera también una nueva oportunidad de trabajo. En su caso, con 37 años, ya ha realizado prácticas en el Conservatorio Municipal de Música, en Tiendas Pavo y Superdroma, éstas últimas gracias al programa EmPlena: «Es una experiencia enriquecedora e inolvidable, volvería sin pensármelo dos veces y espero que se acuerden de mí, tanto como me acuerdo yo de ellos».
Los tres forman parte de este programa de Plena Inclusión en el que participan alrededor de 20 usuarios de la entidad. Todos ellos coinciden en que se sienten capacitados para dar el salto y valoran esta oportunidad para formarse y seguir ampliando el currículum, algo en lo que también trabajan desde el centro ocupacional.
Elizabeth lo hace en el taller de material de papelería y oficina, Joaquín en el de lámparas y Sergio en el de madera, lámparas y papelería. «Un poco de todo y siempre trabajando en equipo». Además, también realizan otros programas laborales y talleres de bienestar físico o entrenamiento de capacidades sociolaborales, entre otros.
«El programa EmPlena es el resultado de iniciativas que llevamos haciendo durante mucho tiempo, aquí previamente se trabajan todas las habilidades para que luego puedan estar en las prácticas o en un trabajo futuro», explica Silvia Moreno, terapeuta ocupacional de Plena Inclusión Don Benito.
Ya durante la Semana de la Discapacidad son muchos los usuarios que realizan prácticas en empresas locales. Si bien, esta iniciativa da un paso más, al tratarse de un programa de prácticas regladas en empresas para que pongan en práctica los conocimientos que reciben en el centro. Lo hacen por períodos de un mes, con un tutor, para completar un total de cuatro meses, alternando empresas en este período.
«Las empresas tienen ganas de participar e incluso les gustaría que fuese más tiempo porque ya cuando ellos empiezan a adaptarse ya casi están por concluir las prácticas», señala Moreno. «El objetivo es dar visibilidad a que personas con discapacidad pueden entrar en el mercado laboral y ser más partícipes de la comunidad a través del empleo, sabemos que están preparados para trabajar, por lo que el fin último es lograr una contratación».
Si bien, la entidad aún no ha conseguido contrataciones con este programa, pero sí la satisfacción de muchos empresarios que se han informado además sobre ayudas y bonificaciones para la contratación de personas con discapacidad. «El mercado laboral en general está difícil, ellos además pueden tener el hándicap de no tener una formación especializada. A ello se suma el desconocimiento de las empresas hacia ellos, por eso este programa es tan importante», indica.
El único requisito es que sean personas que tengan la meta de conseguir un trabajo, Plena Inclusión les ayuda en la preparación y además es importante el apoyo de la familia.
Con poca experiencia, pero con muchas ganas de trabajar, los usuarios del programa también lanzan un mensaje para que otras personas se animen a participar y para que los empresarios vean sus capacidades más allá de su discapacidad. «Que se animen a colaborar con este programa y nos conozcan», dice Joaquín.
Sergio, por su parte, es optimista: «El que busca encuentra, así que, en vez de estar en casa parados, como hay algunos, que salgan y miren en el Sexpe o internet»
Mientras que Elizabeth, además de hacer ese llamamiento para que aumenten las oportunidades laborales, da las gracias a Plena Inclusión y sus trabajadores por la formación y el apoyo que está recibiendo en el día a día.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.