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ALEJANDRO CALERO
Domingo, 15 de febrero 2015, 12:03
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La asociación para la integración de las personas con enfermedad mental, Proines, cumple 20 años buscando mejorar la calidad de vida de sus usuarios y las familias. En 1995, nacieron como grupo de familiares que se reunían en la Parroquia de Santa María de Don Benito y hoy día, atienden a 150 personas con trastorno mental de las comarcas de Vegas Altas, la Siberia y la Serena. Esta organización cuenta, además, con un equipo multidisciplinar de 20 profesionales y gestiona un centro de rehabilitación psicosocial, tres pisos supervisados, un programa de integración laboral y ocupacional, programas de acompañamiento integral, y de escuela de familias y autoayuda, un servicio de información y orientación, y cursos de formación para personas con enfermedad mental.
Todos estos proyectos están financiados por las administraciones, principalmente de la regional. De esta, obtuvo la máxima acreditación sanitaria con la categoría de 'excelente' y en breve renovarán su compromiso mutuo. «Después de 20 años, la asociación planifica a largo plazo, sabiendo muy bien donde vamos y teniendo en cuenta el entorno. Ya tenemos proyectos para otros 20 años si hace falta», asegura Antonio Lozano, gerente, quien señala que gracias a las viviendas tuteladas los enfermos mentales pueden vivir en la comunidad.
Durante todo el 2015, Proines celebrará su aniversario con diversos actos. El más destacado es un concierto benéfico en el que artistas extremeños pondrán música a los versos de las poetisas más reconocidas de nuestra tierra: Dulce Chacón, Carolina Coronado o Lola Santiago, entre otras. Será el 10 de abril en el Teatro Imperial dombenitense.
Inserción laboral
En 2014, Proines consiguió contratos para diez usuarios y ocho realizaron prácticas en alguna de las 55 empresas locales con las que tienen convenios. Otros cuatro también se adentraron en el mundo laboral, como apoyo para mantener los invernaderos que gestionan.
Detrás de estos números hay personas que se motivan y pueden empezar proyectos de vida. De esta forma, «se sienten útiles en la sociedad y dan pasos en su recuperación», como destaca el presidente Casiano Blanco, lo cual le da fuerzas para continuar la labor. «Mientras haya un solo enfermo que no esté tratado, estará Proines para recuperarlo», apunta.
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