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Los jugadores de la selección celebran uno de sus goles. AFP
Mundial 2018 | Clasificación

A Rusia con ilusión

España golea a Albania en una noche redonda, en la que tuvo fases de buen fútbol y recibió la ayuda final de Macedonia en Italia para certificar su billete mundialista

Viernes, 6 de octubre 2017, 02:22

«Hay que pasar página con lo de Piqué y es el momento de centrarse en el partido», recalca Julen Lopetegui desde que el central catalán compareciese sin límite de tiempo para explicarse el miércoles. «Para hacer un buen partido necesitamos el aliento de la afición del Rico Pérez. Quiero hablar de fútbol. El equipo necesita hablar de fútbol. Lo más importante es la pelota y la esencia del juego», reitera el seleccionador nacional.

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Lopetegui, que ha vuelto a dedicar muchos esfuerzos en gestionar asuntos no deportivos durante otra concentración de España, no ha parado, cuando los acontecimientos externos se lo han permitido, de insistir a sus futbolistas en el peligro de Albania. «Logró la clasificación con todo honor para la Eurocopa y allí nos costó mucho ganar. Mereció ganar a Italia. Es una selección que tiene talento, físico y orden táctico. Es un equipo con alternativas», explicó, consciente de la necesidad de lograr un triunfo que deje casi virtualmente logrado el billete para el Mundial de Rusia. Eso permitiría viajar a Israel con mayor tranquilidad, ya que aunque matemáticamente faltaría un punto sólo una debacle en forma de histórica goleada condenaría a España a la repesca.

«Albania es muy complicada, lo demostró ya clasificándose para la última Eurocopa. Allí nos costó muchísimo más de lo que al final pareció, se encierra muy bien atrás y luego en las contras te puede hacer mucho daño. Tenemos que tener cuidado en controlar bien el partido y en cuanto ellos recuperen la pelota estar atentos en las vigilancias, que no nos creen muchas contras y peligro y que las ocasiones que tengamos aprovecharlas», definió Piqué en medio de sus explicaciones política.

Hace casi dos años, en noviembre de 2015 para un amistoso ante Inglaterra, la visita a Alicante también se produjo en circunstancias similares, con la perspectiva de que Piqué sería silbado en el Rico Pérez. «Lo insólito sería que no le pitaran. Es una corriente difícil de parar y creo que no nos debería preocupar ese hecho», dijo con cierta resignación Vicente del Bosque en la previa del partido, después de que en el mismo hotel hubiese casi el doble de personas que este jueves dispuestas a abuchearle de manera mucho más global. Después, en el partido, el asunto derivó en algo surrealista: mientras parte de la hinchada local le silbaba, los ingleses le aplaudían.

Aquel día el catalán era protagonista por un tema nada político: los disfraces de Halloween con los que algunos jugadores del Barça aparecieron en el Coliseum de Getafe, lo que originó una polémica con el presidente azulón Ángel Torres. Ahora la situación es distinta y pese a que el central azulgrana compareció ante los medios a petición propia, parece complicado que su reto de «convertir los pitos en aplausos» vaya a producirse a corto plazo. «Irme de la selección sería darle la razón a gente que no la merece», dijo entonces, argumento muy similar al usado ahora por el azulgrana.

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Parece que hay mucha gente dispuesta a silbar a Piqué en el encuentro de este viernes ante Albania, ya que incluso hay un pequeño grupo de aficionados que insta a arremeter contra el 91 veces internacional español. Los precedentes de otras ocasiones, como León, Oviedo, Logroño o Madrid, dicen que los que le criticaron fueron más sonoros en los partidos que en la práctica previa. Gabriel Echávarri, alcalde de Alicante, quiere que la afición esté a la altura y respalde al central del Barça ante Albania. «Pido a los alicantinos que animen a Piqué», ha solicitado en los últimos días. En el entrenamiento final, división de opiniones en torno a Piqué, ovación a Ramos y mucho ruido.

Dudas

Uno de los que será más ovacionado será el alicantino Saúl Ñíguez, nacido en Elche y que podría ocupar la plaza del sancionado Busquets, aunque por lo visto en el último entrenamiento sería Asier Illarramendi el elegido. «Les pido a mis paisanos que vengan a animar. El tema de los pitos es algo que nos va a unir todavía más y estamos muy centrados en el partido ante Albania», dice sin querer emocionarse mucho por su posible titularidad, ya que Lopetegui no les ha mostrado tan claro las cartas como en otras ocasiones. «Tenía ganas de volver, la anterior vez no estuve -para los partidos del Bernabéu y Vaduz-, por lo que estar aquí es un premio», dice el vasco, que debutó ante Colombia el pasado mes de junio.

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Parece que Lopetegui optará por una defensa de cuatro (con Azpilicueta por Carvajal), si bien podría repetir el plan usado hace un año en Shkoder sin laterales y tener tres defensas (Monreal acompañaría a Ramos y Piqué) para ganar un centrocampista más a sumar a Koke, Thiago, Isco y Silva. Arriba la duda está en mantener a Asensio en el plan con ‘falso 9’, como ante Italia, o usar un punta más estático, tipo Aduriz, el elegido en la última sesión, Aspas o Rodrigo. El delantero valencianista es uno de los siete futbolistas del equipo sub-21 (junto a Bartra, Isco, Nacho, Illarramendi, Koke y De Gea) con los que Lopetegui disputó, en 2012, un partido oficial en el Rico Pérez que terminó con goleada (6-0) a Croacia.

Cambio de italiano en Albania

Albania era la tercera selección en discordia en esta fase de clasificación y tras su buena Eurocopa soñaba con pelear una de las dos plazas a España e Italia. Gianni de Biasi, ahora en el Alavés y que fue el mago que llevó al equipo a su primer gran torneo, dejó el cargo a otro compatriota: Christian Panucci. El histórico defensa italiano cierra esta semana la fase de clasificación ante España, donde jugó en el Real Madrid, e Italia, con la que disputó 57 partidos como internacional gracias a su rendimiento en Milan, Inter y Roma.

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El plan de Panucci es preparar la Eurocopa 2020, que se decidirá con el novedoso sistema de la Liga de las Naciones, y por eso se toma estos dos partidos -tras ganar a Liechtenstein (2-0) y empatar (1-1) con Macedonia- como un banco de pruebas para testar a nuevos futbolistas y mejorar el núcleo heredado por Di Biasi. Mantendrá la idea de defenderse con muchos hombres y buscar el contragolpe con un único punta, que podría ser Sadiku, ausente en Shkoder, ya que tampoco cuenta con Cikalleshi (Osmanlispor), lesionado, al igual que Mavraj (Hamburgo), mientras que su portero Berisha es duda por una gripe. Los precedentes auguran una buena noche para la selección, ya que en los seis partidos anteriores España venció (26 goles a favor y sólo dos recibidos). «Si ganamos, estaremos en el Mundial y queremos hacerlo bien para que se hable de fútbol. Es lo que queremos», deseó Callejón.

España estará en Rusia y lo hará con la suficiencia de los aspirantes al título. Lo certificó en Alicante, después de que tras golear con autoridad y ratos de buen juego a Albania. Nadie contaba con que Italia fallase ante Macedonia pero sucedió, pasadas las 22 horas cuando ya no estaba Gerard Piqué en el campo y la selección ganaba por 3-0. Todos en la selección contaban con conseguirlo en tierra santa, donde pese a que allí se han visto milagros de todo tipo nadie contaba con recibir una goleada histórica. Los futbolistas dejaron el césped con una sonrisa delatadora en la cara, pese a que no sabían que ya era oficial su presencia en el Mundial. Sí lo sabían los suplentes y Julen Lopetegui, el artífice de que esta selección haya vuelto a enganchar con la afición. 13 partidos en casi año y medio en los que ‘La Roja’ ha vuelto a recuperar no sólo los resultados -no ha perdido ni un sólo encuentro y casi roza el pleno en la fase de clasificación- sino el buen juego. Ha armado un equipo ilusionante, tirando de jugadores que fueron titulares en la decepcionante Eurocopa de Francia y mezclando jóvenes a los que forjó en su etapa en las inferiores.

España

De Gea, Odriozola, Piqué (Nacho, min. 59), Ramos, Alba, Saúl, Koke, Thiago, Isco, Silva (Asensio, min. 73) y Rodrigo (Aduriz, min. 81).

3

-

0

Albania

Berisha, Hysaj, Veselli, Ajeti, Memolla, Memushaj, Kaçe, Grezda (Latifi, min. 66), Xhaka, Llullaku, Iván Balliu (Sadiku, min. 46).

  • Goles: 1-0: min.16, Rodrigo. 2-0: min. 23, Isco. 3-0: min. 27, Thiago.

  • Árbitro: Dmitri Mosyakin (Rusia). Amonestó a Llullaku, Kaçe, Xhaka, Grezda, Piqué, Silva, Hysaj

  • Incidencias: Novena jornada en el grupo G de la fase de clasificación para el Mundial de Rusia 2018. Rico Pérez. Casi lleno. 25.397 espectadores, de ellos unos 150 de Albania. Hizo su debut oficial con la absoluta Álvaro Odriozola. Se silbó en algunos momentos a Gerard Piqué. El central catalán y David Silva vieron una amarilla que les impedirá jugar el partido del martes en Jerusalén ante Israel. Marc Bartra fue el descarte de la convocatoria. España logró la clasificación para el Mundial con su victoria y el empate entre Italia y Macedonia.

Ante Albania, que presionó muy arriba en el inicio, Julen sorprendió al hacer debutar a Odriozola y poner de inicio a Rodrigo. Además Saúl fue el elegido para suplir a Busquets. Eso sorprendió menos porque el día de la lista de convocados lo nombró justo después del catalán, su ancla y hombre clave del equipo. El alicantino completó una actuación soberbia, en largo y en corto, pisando campo rival gracias a su zancada e incluso acercándose hasta el área. Le faltó muy poco para el gol. Su trabajo junto a Koke permitió que Thiago, Isco y Silva disfrutaran en la media luna rival, abriendo balones a los costados desde donde Alba y Odriozola buscaron de modo insistente al ariete del Valencia.

Rodrigo tuvo un re-debut en el que mezcló aciertos, especialmente en sus movimientos, y errores en el remate cuando todos cantaban gol. Acertó quizá el más complicado, a los 16 minutos, y para abrir el marcador cuando algunos en la grada dudaban si el ‘9’ le quedaba grande. Se inventó un golazo al controlar con el pecho un pase de Silva, girarse en una baldosa y pegarle con la izquierda a la red. Erró lo sencillo, anotó lo impensable. España buscaba ampliar la renta, pero mostró muchos más desajustes defensivos que el día de Italia. Generó peligro y le faltó acierto para concretarlo. Quizá su mejor opción llegó con un bote traicionero que confundió a Saúl pero Llullaku no supo superar en el mano a mano ante De Gea , que sigue con sus grandes números con Lopetegui ya que sólo ha encajado tres goles en la clasificación. Dejó un paradón a bocajarro ante Latifi. También le ayudó el larguero con Llullaku, algo decisivo sobre todo en la primera mitad cuando el insistente delantero albanés hubiese superado por alto a Alba.

Fue el chispazo que hubiese calentado el partido, ya que España ya ganaba 2-0 gracias a un tanto soberbio de Isco después de una combinación tan llamativa como precisa entre Koke y Silva. Una delicia que recordó a los mejores tiempos de ‘los bajitos’. Ramos, que a veces le puede el espíritu Beckenbauer y se incorpora al galope al ataque sobrepasando sus propios centrocampistas, había buscado en un golpe franco el suyo gracias a su potente juego aéreo. Lo encontró Thiago, quizá a veces acelerado pero que fue abarcando más campo con acierto a medida que corría el reloj. Tenía claro que las llegadas debían hacerse por fuera y el fútbol generarse por dentro.

Así Odriozola se pegó otro sprint, en una de los muchos profundos que le regaló Silva, para llegar en velocidad y superioridad con el tiempo necesario para poner un centro medido para la incorporación del centrocampista del Bayern, que marcó emulando a un especialista de área. El realista completó un gran debut, llegando para dejar regalos que no aprovechó Rodrigo. No le anduvo a la zaga Alba y regaló asistencias desde su lado, pero Berisha frenó los intentos. Especialmente bella fue una intervención a testarazo de Koke.

En la segunda mitad, aunque siguió presionando arriba, España se gustó demasiado. Isco se olvidó de los consejos de su entrenador y empezó a ser más efectista que efectivo, desperdiciando algunas situaciones para que el equipo hubiese ampliado la renta. Se topó en un centro-chut con la madera pero perdió claridad en la asociación. La grada, una vez se terminó el sainete de pitos y aplausos con cada balón que tocó Piqué hasta irse, empezó a pedir a Asensio, que rozó el cuarto en un golpe franco justo después de que Trajkovski, con su gol a Italia, hubiese certificado el billete mundialista. España se llevará ilusión y buen fútbol en su maleta.

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