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Pablo Molina, en una acción del pasado domingo ante el Calamonte. :: L. CORDERO
Adolfo Muñoz respeta el choque frontal de objetivos
tercera

Adolfo Muñoz respeta el choque frontal de objetivos

Con la ausencia de Asiel y la duda de Santi Polo, el técnico del Cacereño pide cautela para la visita de este domingo a Fuente de Cantos

J. CEPEDA

Miércoles, 8 de marzo 2017, 07:32

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Adolfo Muñoz quiere que nadie en el Cacereño baje la guardia en esta recta final de liga. El entrenador del equipo verdiblanco asegura que, a pesar de la relativamente cómoda ventaja sobre el segundo clasificado, su equipo tendrá que sudar aún para llegar al 14 de mayo como campeón del grupo extremeño.

Y el primer aviso no tardó en llegar: «¿Hay un objetivo más importante que el de no perder una categoría? Está muy bien eso de ser campeones, pero la permanencia tiene mucha importancia. Y nosotros vamos a jugar contra un equipo que intenta salvar la categoría», dijo refiriéndose al Fuente de Cantos tras vencer al Calamonte.

Y es que el Cacereño afrontará el domingo (Francisco de Zurbarán, 12.00 horas) el primero de los diez últimos partidos frente a un rival dispuesto a morder, situado en puestos de descenso pero a tan solo tres puntos de la salvación

Respecto a la enfermería, además de la baja del atacante Martins Diop, quien aún continúa recuperándose de su última lesión, Santi Polo intentará a partir de hoy probar sensaciones con el grupo de trabajo, aunque con precaución para evitar recaídas, tal y como reconocía ayer el experimentado lateral izquierdo. Su demarcación en las dos últimas semanas ha sido ocupada por el joven gaditano Pablo Molina, de quien el técnico verdiblanco tiene buenas palabras tras haber cumplido el expediente: «Lo está haciendo fenomenal y con confianza. Esa es la recompensa de no haber bajado los brazos. Y así tiene que ser con todo el mundo».

Además, el cuerpo técnico se verá obligado a hacer algún cambio en la línea defensiva debido al partido de sanción que tendrá que cumplir Asiel por acumulación de tarjetas amarillas. Está por ver si concede la oportunidad de la titularidad Abdel o si por el contrario opta por realizar alguna conversión con otros jugadores con más peso específico.

Un pelotero que ha tenido un dulce regreso al Príncipe Felipe es Fran Minaya, quien el domingo firmó de un extraordinario disparo el gol de la tranquilidad para el Cacereño ante el Calamonte: «Ha sido un mes y medio muy difícil porque las de ligamento son lesiones complicadas, pero por suerte fue en mi pierna menos buena y ahora he vuelto bien y con confianza». Su próximo objetivo individual pasará por recuperar una titularidad que había sido indiscutible hasta su parón.

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