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Yacine reclama al juez de línea que el gol fantasma del Mérida había traspasado la línea. :: j. m. romero
Falta de puntería en el Romano
segunda b

Falta de puntería en el Romano

El Mérida desaprovechó hasta cuatro claras ocasiones de gol y encadena ya cuatro partidos sin ver puerta

FERNANDO GALLEGO

Lunes, 23 de enero 2017, 07:31

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Un domingo más, la falta de puntería volvió a condenar al Mérida a un empate insuficiente. Y un domingo más, ante un rival directo en la lucha por el playoff como el Melilla. Aunque el choque fue tremendamente igualado en cuanto al juego, el Mérida fue muy superior en ocasiones claras de gol. Para su desgracia, encadena cuatro jornadas sin marcar y, por tanto, cuatro jornadas sin ganar. Para su fortuna, está a la misma distancia del cuarto que la semana pasada.

Eloy Jiménez sorprendió tanto en la alineación como en la convocatoria. Se quedaron sin vestir, aparte de la última incorporación en el mercado de invierno, Víctor Mongil y José Ramón Lavado. El central está apercibido de sanción y el técnico emeritense prefirió guardárselo para su visita del próximo sábado al Granada B. Su lugar en el eje de la zaga lo ocupó Ayoze, que cumplió perfectamente tras muchas semanas sin jugar. Además, el acompañante de Pardo en la organización del juego no fue ni Javi Chino ni Antonio Romero, sino Álex Bernal, que estrenó titularidad con Eloy Jiménez con nota.

El partido arrancó espeso, con la pelota merodeando más las inmediaciones de Salcedo que de Dani Barrio. Principalmente por la movilidad de Kiu en banda derecha y la inteligencia de Nacho Aznar en punta. Pero el Mérida se fue haciendo con el control del partido con el paso de los minutos y, a partir del 25, comenzó a encadenar las llegadas más peligrosas. Las tres más claras fueron el gol fantasma en el 27 tras un cabezazo de Yacine, el disparo de Hugo Díaz desde la frontal del área pequeña con todo a su favor que salió rozando el palo en el 37 y otro disparo de Yacine tras jugada individual del ariete que cruzó demasiado en el 44. Un domingo más, Hugo Díaz y Yacine volvieron a ser los dos mejores del equipo, por su participación y presencia en el juego, y sin embargo son los protagonistas de la falta de puntería que persigue al equipo.

Lesión de Dani Fernández

El inicio de la segunda mitad del Mérida evidenció a cuál de los dos le urgían más los tres puntos: dio dos pasos hacia adelante el equipo de Eloy Jiménez, lo que derivó mayor peligro (por los espacios) a la contra del Melilla. Un mal control de Nacho Aznar dentro del área en el 48 y un corte acertado de Pardo al propio Nacho Aznar en el 52 evitaron dos mano a mano claros del conjunto azulino, siempre muy bien plantado y con criterio en cada una de sus acciones.

Entonces llegó la primera mala noticia de la mañana para el Mérida: en una jugada fortuita, Dani Fernández se rompió en el 54'. Hasta mediados de semana no se sabrá el alcance de la lesión muscular, y ya sin Rafa Navarro, su sustituto en el lateral derecho esta temporada, Eloy Jiménez tuvo que tirar de Álex Díez, otro que cumplió con nota los 35 minutos que jugó. No notó el Mérida el cambio de cromos en esa demarcación, porque tanto Dani como Álex son parejos en sus cualidades y características.

Pasaban los minutos y el Mérida se volcaba cada vez más. Pero agua. Hugo Díaz lanzó al lateral de la red, ya con la puerta vacía, tras regatear al guardameta dentro del área en el 58. Y poco después, tras una gran internada de Álex Díez por su banda, el propio Hugo Díaz remataba el centro con la puntera para que se estrellase en la madera.

Podría haber disfrutado de goles el Romano si el colegiado hubiera señalado los dos penaltis que solicitaron ambos equipos hacia el ecuador de la segunda parte. Primero reclamó Nacho Aznar uno de Paco Aguza en el área del Mérida y posteriormente reclamó otro Diego Cascón, que debutó en los últimos 25 minutos del partido, por un agarrón de Mahanan.

Pero donde tuvo trabajo el colegiado fue en el tramo final del encuentro. Ambos banquillos se enzarzaron en una tangana considerable porque ninguno de los dos equipos lanzó el balón fuera cuando un jugador del Melilla estaba en el suelo. El segundo entrenador azulino, Moha, afeó el gesto al banquillo del Mérida y Eloy Jiménez le contestó que el Melilla tuvo la oportunidad de hacerlo en la jugada anterior y no lo hizo. Ambos fueron expulsados por «encararse con un integrante del cuerpo técnico del equipo contrario dirgiéndose a éste con gritos y gesticulando, provocando un enfrentamiento colectivo entre los integrantes de ambas áreas técnicas».

El partido puso el punto y final con el Mérida volcado y el Melilla dejando correr el tiempo tras la expulsión de Diakaté en el 88.

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