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El reto de Zidane: el mejor Cristiano para los grandes partidos
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El reto de Zidane: el mejor Cristiano para los grandes partidos

De sus 25 goles, la mayoría fueron ante rivales de segundo nivel, y ninguno de ellos fueron ante los equipos más competitivos de Liga o Champions League

Rodrigo Errasti Mendiguren

Miércoles, 13 de enero 2016, 11:46

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Horas después de acudir a Zurich a la gala del Balón de Oro, Cristiano Ronaldo se presentó en Madrid con una sonrisa en la cara tras un día largo en el que mostró su mejor cara pese a no ganar un tercer Balón de Oro consecutivo. Era algo que se esperaba y por tanto no fue algo doloroso para él. En el entrenamiento del martes en la Ciudad Deportiva de Valdebebas, la plantilla madridista felicitó a los premiados: Luka Modric, Sergio Ramos, Marcelo y el propio portugués por estar en el mejor once mundial de 2015. Los cuatro posaron junto a los trofeos, con un Zinedine Zidane en segundo plano tras todos los futbolistas, antes de iniciarse una sesión en la que Odegaard, Mayoral y Llorente participaron pero no el central de Camas, que estuvo en el gimnasio. Esta semana, antes de recibir la visita del Sporting, el objetivo del cuerpo técnico es mejorar los aspectos defensivos, aunque no encajase 40 días después, que no funcionaron ante el Deportivo, que le llegó a rematar en posiciones peligrosas en varias oportunidades, y conseguir sacar el mejor rendimiento de todos, algo que sí pareció suceder ante el Deportivo, a excepción de un Isco que fue el menos entonado de todos los madridistas.

Más allá de mantener el buen rendimiento y la actitud colectiva, Zidane desea recuperar al mejor Cristiano, ese goleador decisivo en los grandes encuentros. Aunque los próximos rivales son de segundo nivel (Sporting, Betis, Espanyol y Granada) considera que volver a ver portería (algo que ha conseguido 25 veces esta campaña en el mismo números partidos) le llenará de confianza de cara a afrontar esos grandes duelos (ante el Athletic el 13 de febrero, cuatro días antes de visitar el Olímpico de Roma). Y es que sus buenos números globales son un poco engañosos, ya que el 80% de los tantos los logró en sólo siete de esas citas y el 25% fueron desde el punto de penalti. Además, los rivales ante los que consiguió anotar fueron varios de los menos competitivos de cada torneo: 6 al Malmoe, 5 al Shakhtar Donetsk y también al Espanyol, dos frente al Rayo Vallecano y a la Real Sociedad y un tanto frente a Levante, Celta, Las Palmas, Eibar y Getafe.

Si no marca, pinchazo

Llama la atención que no fuera capaz de perforar la meta de ninguno de los más fuertes de la Liga (Barcelona, Atlético, Villarreal, Sevilla, Valencia o Athletic. En Champions League tampoco lo hizo en los dos encuentros ante el París Saint Germain, uno de los pocos rivales a los que su equipo fue capaz de batir sin ayuda del luso. Ese 1-0 gracias al acierto de Nacho Fernández y el 1-2 de Bilbao, gracias a dos errores de la zaga vasca, son los único días que su equipo logró ganar ya que perdió frente al Barcelona (0-4), en Sevilla (3-2) y Villarreal (1-0) mientras que sólo pudo empatar ante Atlético (1-1) y Valencia (2-2). Las estadísticas de Cristiano han bajado respecto a la campaña pasada, cuando sumaba 31 goles (26 repartidos en 14 de los 18 jornada y cinco en cuatro encuentros de Champions).

Su estatua, pintada con el nombre y el dorsal de Messi

  • en madeira

  • El nombre de Lionel Messi y su dorsal N.10 aparecieron pintados en rojo en la estatua de Cristiano Ronaldo en Funchal, la capital de su isla natal de Madeira. Este acto de vandalismo se produjo en la madrugada del lunes al martes, algunas horas después de la entrega del Balón de Oro 2015 al jugador del Barcelona, que derrotó a su rival del Real Madrid y a Neymar.

  • El Diario da Noticias da Madeira precisó que la estatua se limpió rápidamente. "Es un acto vergonzoso cometido por alguien envidioso", reaccionó Katia Aveiro, hermana del capitán de la selección de Portugal, en las redes sociales, donde se encontraban imágenes de la estatua con la pintada.

  • La estrella portuguesa inauguró en diciembre de 2014 una estatua de bronce con una altura de 3,40 metros en el paseo marítimo de Funchal, a algunos metros de su museo, que él mismo financió.

El luso está ansioso sobre el campo, algo que se pudo notar ante el Deportivo cuando no era capaz de superar a Lux, si bien públicamente él dice no sentirse agobiado por ello. «Lo más importante es la dedicación y el trabajo duro. El talento sin esfuerzo no significa nada. El hecho de estar por octava vez entre los tres finalistas no es una coincidencia», dijo el portugués en Suiza. «A mí me encanta jugar al fútbol y me encanta batir récords», reconoció en la conferencia de prensa previa a la gala.

Sus compañeros también saben que está en un momento complicado, pero sacan la cara por él. «Considero tanto a Messi como a Cristiano dos extraterrestres. La lucha y la pelea constante y diaria que tienen es inhumana», dijo un Sergio Ramos al que se le escapó una confesión. «El cambio de entrenador nos ha venido muy bien. Ojalá sea un gran año para el Real Madrid», reconoció el central desde Zurich en una frase que ha causado cierto revuelo. Hay varios futbolistas que parecen más felices con el cambio de Zidane por Benítez. Quizá el que más sea Karim Benzema, defendido todos estos años en público y privado por Zizou, que en el debut del nuevo entrenador no fue sustituido por primera vez en meses y gracias a ello logró el 5-0 final cuando el duelo agonizaba. Con este doblete ante el Deportivo, suma ya 14 goles e iguala a Cristiano en la lucha por el Pichichi blanco... aunque con muchos menos minutos. Ahora mismo, el 9 tiene una media de un tanto cada 73 minutos, casi 50 menos que Cristiano (122) e incluso mejor que Bale (93).

Dosificar esfuerzos

De hecho, tiene el mejor registro de todos los máximos anotadores de Europa... y eso que no lanza penaltis. Sin contar las penas máximas, superaría a Cristiano (que tendría 10), Neymar (12) e igualaría a Luis Suárez. En su etapa de jugador, Zidane fue uno de los futbolistas más sustituidos de la plantilla madridista. Zidane no se enfadaba cuando Del Bosque o Queiroz le cambiaban; sabía que era mejor reservarse para las grandes citas e intentará, aprovechando su experiencia personal, hacer entender a Cristiano de la importancia de aprovechar sus mejores minutos en las grandes ocasiones.

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