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Rafael Benítez, antes de un partido.
El dilema de Benítez
Jornada 12

El dilema de Benítez

La derrota y la imagen del Real Madrid en Sevilla condicionan a su técnico para un clásico que deja secuelas

Ignacio Tylko

Jueves, 19 de noviembre 2015, 09:18

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Cuestionado desde un amplio sector de la directiva madridista, visto con reticencia por pesos pesados de la plantilla merengue que añoran a Carlo Ancelotti y señalado por gran parte de la crítica tras su primera derrota ante el Sevilla, Rafa Benítez afronta un examen ante el Barça que le exige definirse.

Aunque sea noviembre y se trate sólo de la 12ª jornada de Liga, cualquier clásico deja secuelas, en ocasiones de carácter irreversible. Frente al Barça, no caben excusas, ni vacilaciones, ni medias verdades. Si ganas, héroe por unos días. Si pierdes, villano quizá para toda la temporada.

Al abrigo de los buenos resultados hasta la derrota en el Pizjuán, Benítez tendrá que desnudarse frente a los azulgrana. Recupera a un buen puñado de titulares -Keylor Navas, Carvajal, Sergio Ramos, Marcelo, James y quizá Benzema- y debe de tomar decisiones de calado sin la justificación de las lesiones.

La presión es grande para el técnico madrileño, curtido en mil batallas pero sabedor de que el Real Madrid no es el Liverpool. Lejos de aminorar la marcha y perder distancia, sin Messi y repleto de lesiones, el Barça ha crecido hasta el punto de situarse líder, tres puntos por encima de su eterno rival. Y eso duele en Chamartín.

Según publica Marca, el lunes se produjo una cumbre en Valdebebas entre el técnico y tres de los cuatro capitanes. Al parecer, Ramos, Cristiano y Marcelo -Pepe se encontraba concentrado con la selección de Portugal- se encerraron durante veinte minutos con Benítez para persuadirle sobre la necesidad de dar un paso al frente, especular menos y salir en busca del Barça. Los jugadores, que hablaron en nombre de toda la plantilla, consideran que no es necesario blindarse tanto si con ello se reducen el potencial ofensivo.

Según este mismo medio, Benítez les respondió que está de acuerdo con que el plan de dominar, llevar la iniciativa y no atrinchere después de ponerse en ventaja, pero también les hizo ver que el conservadurismo se debía a la plaga de lesiones, en especial de jugadores tan ofensivos como James Rodríguez y Karim Benzema. Se acerca en el tiempo esta información a otra, publicada en El Confidencial, en la que se asegura que Cristiano Ronaldo le dijo a Florentino Pérez que con Benítez no iban a ganar título alguno.

Frente al poderío culé, será el momento de ver si Keylor Navas es el verdadero sostén blanco. Recuperado de una sobrecarga, el portero tico será titular después de faltar en Sevilla, donde Kiko Casilla no tuvo precisamente el santo de cara.

A vueltas con Casemiro

La afición y la crítica desea conocer si Casemiro, muy bien ponderado porque ha dado equilibrio al centro del campo, se mantendrá como gran apuesta de Benítez para el 4-1-4-1 que los seguidores del técnico tanto le alaban como gran aportación al Real Madrid. ¿Será titular también al volver los lesionados? ¿Será capaz de responder en un día tan señalado y frente a un enemigo de tanto fuste?

Con Modric y Kroos indiscutibles, aunque hasta la fecha no aportan este curso como se les exige, sobre todo al quedar más liberados de defender al tener a Casemiro de escudero, ¿quién sería el sacrificado si juega Casemiro? James ha jugado con su país y no alinearle en el clásico supondría tensar aún más la cuerda. Tras marcar frente a Chile, el colombiano se acordó de su entrenador y de quienes le acusan de no estar en forma.

A priori, Isco tiene muchas papeletas de ser carne de banquillo. El malagueño es el menos mediático y quizá el más intermitente. Desequilibra y es más centrocampista que James y que Gareth Bale, pero Benítez le pide más.

Bale y Cristiano son fijos, aunque un amplio sector del madridismo considera que su equipo se parte más y es mucho menos simétrico con el galés que con Isco. Está por ver dónde les situará Benítez. Bale quiere jugar de ariete o de segundo punta y alejarse de la banda, y el técnico madrileño suele darle rienda suelta. Y Cristiano actúa de '9', como reclamaba gran parte de la crítica, pero apenas interviene en el juego, está bajo de forma y se desespera cuando ve que sus compañeros se alejan de él y del área rival.

El puzzle del atribulado Benítez está a expensas de una pieza tan importante como extraña. Karim Benzema sufrió un problema en los isquiotibiales en un Francia-Armenia, jugado el 8 de octubre, y ya suma mes y medio ausente. Parecía plenamente recuperado pero se retiró del entrenamiento del miércoles. Mentalmente, debe de estar afectado por su imputación en el chantaje a Mathieu Valbuena, compañero de selección, por un vídeo sexual.

Si está en condiciones, Benítez tiene otro bendito problema a la hora de escoger. Karim hace mejores a sus compañeros de ataque, sobre todo a su socio Cristiano Ronaldo, pero todos no caben. El once podría formarse con Keylor; Carvajal, Ramos, Pepe, Marcelo; Casemiro, James, Modric, Kroos, Bale y Cristiano.

Focos y lupa de gran aumento en torno a Benítez. Su equipo se ha dejado ya nueve puntos y se muestra irregular: capaz de maravillar en fases frente al Atlético, Celta o Sevilla y luego de desplomarse. Capaz también de ser bailado por el PSG y de ganar el partido.

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