Las dudas siguen con y sin Cristiano

Pasan los años y los entrenadores pero al equipo blanco sigue gustándole correr al contraataque. Cuando surgían espacios para correr, Bale, Cristiano y Jesé se encontraban cómodos y llegaban con facilidad a la portería del equipo otomano. Los tres cambiaban continuamente su posición y aparecían por cualquier lugar del frente del ataque. El que estuvo más desaparecido que de costumbre fue Isco. El malagueño, que era el mejor en la pretemporada, volvió a jugar en la derecha. En el partido que cerraba la pretemporada madridista se esperaba otra exhibición, pero estuvo menos incisivo de lo habitual, aunque estrelló un balón en el larguero. Lo más peligroso del equipo de Hamza Hamzaoglu llegaba con los disparos lejanos de Podolski y con la visión de juego de Sneijder, cuyas combinaciones con Bulut pusieron en aprietos a Keylor Navas, pero el costarricense no tuvo que hacer ninguna acción de mérito.

Sergio Ramos, gran protagonista de la semana, saltó en la segunda parte aplaudiendo a su público, a lo que la afición respondió con más aplausos para su capitán. Sin embargo, a los presentes en el Santiago Bernabéu no les gustó tanto el inicio de su equipo en la segunda mitad, que salió desenchufado. Esto lo aprovechó Sneijder, que tras una recuperación y una mala transición defensiva del Madrid se plantó en la frontal del área para batir a Navas con un buen disparo con su pierna derecha. No se sabe si por su pasado madridista o por el mal partido de los de Benítez, se oyeron ligeros pitos en el estadio blanco. El sonido de viento pareció despertar al Madrid, que tuvo tres ocasiones seguidas claras: un gol anulado correctamente a Cristiano, un posible penalti sobre James y un mano a mano de Isco bien detenido por Muslera.

Los cambios cambiaron el esquema del Real Madrid al 4 4 2 y colocaron a Cristiano y a Bale como delanteros, con James y Lucas Vázquez por las bandas. El partido entró en un tramo lleno de imprecisiones que rompió Marcelo con un golazo a falta de diez minutos del final. El brasileño, que ya había avisado con anterioridad, dribló a dos rivales, dejó sentado al tercero pisando la pelota y definió con la puntera en la mejor jugada de la noche. Después, más cambios, y con el de Bale llegó de nuevo la división de opiniones al Bernabéu. Con la polémica en torno al galés y otra ocasión de Cristiano Ronaldo se acabó el partido. Se esperaba que con la vuelta del astro de Madeira volvieran los goles que faltaron en los anteriores partidos de pretemporada, pero la delantera merengue no estuvo acertada. Así concluyó una última prueba antes de empezar la competición que deja algunas dudas en el equipo dirigido por Benítez.