Borrar
¿Qué ha pasado hoy, 28 de marzo, en Extremadura?
Juan Carlos Garrido.
El partido del año

El partido del año

Juan Carlos Garrido analiza la final de la Champions antes de la disputa del título entre el Real Madrid y la Juventus

JUAN CARLOS GARRIDO

Sábado, 3 de junio 2017, 17:26

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

 Nos disponemos a presenciar el partido del año entre dos grandes campeones con historia y títulos a sus espaldas. Dos equipos ganadores y exigidos a ganar. Ambos garantizan un gran espectáculo en un partido de grandes duelos como en los banquillos con Zidane frente a Allegri, el de Cristiano Ronaldo contra Buffon, el de Higuaín contra Sergio Ramos o el de Marcelo contra Alves. Un bloque sólido contra otro con mucho talento. Una final de los campeones.

     Zidane y Allegri son dos entrenadores muy diferentes pero muy parecidos en la actitud que desarrollan ante sus jugadores, a los que convierten en los verdaderos protagonistas. El francés ha demostrado una excelente gestión de sus estrellas, tan importante en estos clubes. Ha sabido dar confianza a muchos jugadores que se han sentido muy respaldados por su entrenador sin dar grandes titulares y ha sabido manejar una plantilla larga con muchas estrellas mundiales y que difícilmente se conforman con un papel secundario como James, Morata, Isco, Asensio, Lucas. Zidane ha conseguido que todos estos jugadores se pongan a disposición total del equipo y sigan trabajando sin estridencias, creando una plantilla más competitiva.

     Quizá el caso más significativo sea el de Isco, que está consiguiendo la titularidad por encima de una de las estrellas galácticas de los blancos: Gareth Bale. Con este cambio, Zidane demuestra que sus decisiones están basadas en el rendimiento de sus jugadores, que están por encima de las tácticas. Se especulaba que Isco jugaría en la derecha, el sitio de Bale, por no cambiar el sistema táctico, pero obviamente Isco no es un jugador de banda sino un media punta. Con Isco en el campo, el dibujo cambia y se le da más importancia al centro del campo, al toque, creando un rombo en el que Casemiro adopta el papel defensivo, Kroos 'se tira' a la izquierda y Modric a la derecha en la parte creativa, con Isco por delante de ellos cerca del área.

     Esta puede ser una de las claves del partido, porque el Madrid debe aprovechar su superioridad numérica y técnica en el medio campo. La posesión de estos cuatro jugadores en el centro del campo es la que puede conectar con el gol, donde aparecen Benzema y Cristiano. Un CR7 que cada vez es más delantero aunque parta desde la izquierda, para encontrarse con su socio preferido, un Benzema que más que como goleador es necesario en el Real Madrid para asistir al portugués y servir de conexión para las jugadas de gol.

     En cuanto al liderazgo de cada equipo, en el Real Madrid queda claro que es de Cristiano Ronaldo. Es la estrella del equipo y así lo aceptan sus compañeros, que saben que él es el protagonista principal y el que tira del carro en los momentos decisivos. Por el contrario, la Juventus es un equipo en el que la estrella es el equipo y teniendo grandes jugadores ninguno de ellos es más importante que el equipo. Quizá Dybala es el jugador que juega un papel más talentoso y desequilibrante en un equipo muy trabajado y sacrificado.

     Porque para Allegri el equipo está por encima de las individualidades y vemos a Mandzukic jugando en la izquierda y defendiendo como un lateral a pesar de ser un auténtico delantero centro, a Dani Alves peleando como nunca, a Higuaín en su mejor momento y, sobre todo, el corazón de la máquina, Buffon, Barzagli, Bonucci y Chiellini. Cuatro gladiadores curtidos en mil batallas, competidores, maduros, que saben manejar el ritmo de los partidos y desactivar el juego ofensivo de cualquier rival.

     Su carácter competitivo y la necesidad de ganar una Champions como colofón a sus carreras les hace extremadamente peligrosos. Son los que lideran una línea defensiva que puede ser de tres, cuatro o cinco, según requiera cada momento del partido. Han recuperado al mejor Alves con Barzagli cubriendo su espalda, cuentan con un gran lateral izquierdo, Alex Sandro, y facilitan el trabajo de sus medios, Khedira o Marchisio, y Pjanic. Y luego tienen la opción ofensiva de Cuadrado para la banda derecha. Todos ellos trabajan incansablemente para encontrar la inspiración de Dybala y el gol de Higuaín.

     Casemiro tendrá una papeleta muy dura con Dybala, pero el gran duelo de la defensa blanca es el de Sergio Ramos con Higuaín. Se conocen a la perfección y se respetan. El central suele ser decisivo, pero se enfrenta al muro de Buffon y el 'Pipita' tiene sed de venganza contra aquellos que le acusaban de falta de gol y que entendían que el delantero del Real Madrid no podía tener más ambición de gol que Cristiano.

     En las bandas nos encontramos con los dos grandes brasileños. Un renacido Alves a veces de lateral, con Cuadrado por delante, y a veces de extremo, con Barzagli detrás, pero en ambos casos con llegadas decisivas de gol. Eso sí, esta vez se enfrenta al mejor lateral izquierdo del mundo. En la otra banda Carvajal tendrá que tapar a Mandzukic y esperar las llegadas de Alex Sandro, para lo que necesitará la ayuda de Modric o Isco cuando no tengan el balón. En esta banda puede sufrir el Madrid sin un extremo claro.

     Y el duelo de los duelos será el Buffon-Cristiano. ¿Cuál de los dos conseguirá la gloria? Un Buffon que puede pasar como el mejor portero de la historia y que sin lugar a dudas merece una Champions, o el insaciable Cristiano, que llega en el mejor momento de la temporada y con sus ambiciones en el pico más alto.

     Estos grandes partidos se suelen resolver en una jugada, en un detalle de sus grandes futbolistas. Por eso no me atrevo a apostar por un ganador, pero sí me atrevo a decir que será un gran partido, una gran batalla táctica, un gran duelo de talentos y en el que todos los que amamos el fútbol disfrutaremos.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios