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Juanfran, durante un partido del Atlético.
Juanfran, el héroe que nunca deja de creer
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Juanfran, el héroe que nunca deja de creer

No había lanzado nunca un penalti en partido oficial pero confirmó el pase del Atlético a cuartos con un golpeo perfecto tras otro de Filipe, que tampoco quería tirarlo

Rodrigo Errasti Mendiguren

Jueves, 17 de marzo 2016, 13:37

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"Nosotros creemos. Nuestro entrenador nos hace creer. Tenemos mucho alma y corazón, creemos en todo lo que hacemos y esa es una de nuestras señas de identidad", reconocía con una sonrisa Juanfran Torres en la zona mixta del Calderón en torno a la una de la madrugada. Siempre suele ser el último en irse del campo pero esta vez con más motivo, fue el autor del gol que certificó por tercera campaña la presencia del Atlético en cuartos. Y eso que no se entretuvo contestando las felicitaciones que había recibido en su móvil, con una bateria agotada tras recibir mensajes de alegría atlética. "Al marcar el penalti lo primero que he sentido es felicidad por las personas que han venido y que lo han visto en casa, escuchando por la radio. Por todos los atléticos. Felicidad. Contento y orgulloso de ser el motivo para que ellos estén contentos y orgullosos de su Atlético de Madrid".

 El alicantino, ese extremo reconvertido a lateral por Simeone y que cada vez está más fuerte, como se pudo ver en su celebración, no estaba entre los cinco primeros elegidos por el Mono Burgos, que diseñó la estrategia desde los once metros en el césped porque Simeone confesó que no los habían ensayado. "No es lo mismo con la tensión detrás, ni con 120 minutos en las piernas. Germán (Burgos) eligió a los que lanzaron contra el Bayer Leverkusen, y lo volvieron a hacer. El Mono eligió quienes pateaban, nunca es fácil saber elegir". Eligió la portería del fondo norte, la misma que ante el Leverkusen y puso cinco nombres en una lista, en la que a Cholo veía mejor a Giménez que a Saúl. Finalmente el canterano, que casi marra la pena máxima, se mantuvo y el uruguayo, que en Danubio y las inferiores charrúas lanzaba penas máximas, sería el primer suplente. Demostró que era un seguro en el sexto.

Pero nadie fallaba y empezaron a quedar menos candidatos. "Estaba nervioso como todos mis compañeros, tienes que tener nervios para que la sangre fluya bien. Estábamos sufriendo los que nos podía llegar el turno, que no nos dijera a nosotros (ríe). Filipe, aunque no lo reconozca, tampoco quería tirarlo. Ni Lucas, que era el siguiente, ni Matías.", dijo refrendando lo que habían comentado los dos jugadores de campo que, junto a Oblak, se quedaron sin lanzar. Después de Filipe, Burgos le miró a él y le dijo con gestos que el séptimo sería para el de la barba, para 'Juan'. "No soy de tirar penaltis, ni en los entrenamientos. Hacía muchísimo que no tiraba. Recuerdo uno que lancé con Osasuna, en un amistoso de pretemporada contra la Lazio, y también lo metí por lo mismo sitio. Creo que es el segundo como profesional".

Su familia, su motivación

Pese a su falta de experiencia en las penas máximas, explicó que cuando se dirigía al punto de penalti "pensé que iba a salir bien, que lo iba a meter y pasábamos. Lo tenía claro, soy un tío positivo en la vida, para todo. Estaba convencido de que las cosas saldrían bien". De que lo marcaría y del lugar por el que lo lanzaría. "Lo tenía claro desde que sabía que era yo, abajo y a la derecha. Es una premisa que nos dijo el míster: 'No dudéis, por donde tengáis en mente tiradlo por ahí. Cero dudas'. En general todos los han tirado bien. Hemos tenido más sangre fría al final en los penaltis. Estos momentos son inolvidables", explicó antes de confesar que concedió un premio a Óliver, su primogénito. "Quería que viniese mi hijo aunque se pierda un par de horas de colegio, irá más tarde pero quería que viviera este momento. Feliz de que haya venido, dado suerte y hayamos ganado".

Juanfran, que por fin pudo dedicar un gol a su hija Alexia, nacida en octubre de 2015, quiso poner en valor la clasificación a cuartos lograda por tercera campaña consecutiva. "Trabajamos mucho para que lleguen estos momentos. Ahora a disfrutarlo y en cuartos, toque quien toque, será más difícil todavía. Lo daremos todo y lucharemos hasta el final. Hay que seguir creyendo en nosotros. Estamos entre los ocho mejores de Europa", explicó antes de valorar como un halago las declaraciones de Arbeloa, que quería que el PSV eliminara al Atlético. "En parte tiene razón. Normal que Arbeloa no quisiera que pasáramos, sabe lo difícil que es jugar contra nosotros", recordó, antes de expresar el deseo del vestuario de no quedar emparejado con ningún equipo español. Suceda lo que suceda en Nyon, Juanfran, como el Atlético, nunca deja de creer.

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