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Luis Suárez celebra el segundo gol.
Reacción de campeón
2ª JORNADA

Reacción de campeón

El Barça se sobrepuso a la baja de Messi y logró una victoria heroica ante un gran Leverkusen

Ignacio Tylko

Martes, 29 de septiembre 2015, 01:34

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En el primer día sin Messi, el Barça salió desorientado, como si hubiera perdido a su guía, al faro que ilumina todo su juego y cuyos destellos ciegan a sus adversarios. Ganó al Leverkusen porque los duelos en el Camp Nou se hacen muy largos para cualquier eneigo, Luis Suárez es una garantía de gol y del campeón siempre cabe esperar una respuesta heroica, pero sufrió una inmensidad y se mostró vulnerable. Salvó un duelo trampa con dos goles en apenas dos minutos y es líder de grupo, pero sembró enormes dudas y, además, perdió por lesión muscular a Iniesta.

En el primer acto, fue una caricatura de equipo en ataque y, lo que es más preocupante, también en defensa. Fue incapaz de gobernar el centro del campo, de dar fluidez al juego y de controlar a los alemanes. Si algo tiene el Bayer Leverkusen es osadía, como ya dejó patente cuando el curso pasado cayó por penaltis ante el Atlético en octavos de final. El equipo dirigido por Roger Schmidt es irregular pero si por algo te caracteriza es porque es capaz de salir a tumba abierta ante el Bayern de Múnich o en feudo del mismísimo campeón de Europa.

Ante un adversario de estas características, el peor de los escenarios para el Barça era aceptar un duelo de ida y vuelta, de fútbol puro, con muchas pugnas individuales y sin pausa. Con esas trazas, los alemanes son superiores porque, como diría Luis Aragonés, su condición física de base es mejor. Los culés tuvieron que hacer enormes esfuerzos en ese período para retroceder y casi nunca llegaron a tiempo para las ayudas. Busquets y Rakitic no pudieron frenar las acometidas de los teutones en un período inicial en el que Iniesta tuvo que defender por todos.

La versatilidad y rapidez de jugadores como el esloveno Kampl, por la derecha, y Bellarabi, internacional alemán de padre marroquí, por la izquierda, le hizo mucha pupa a un Barça desconectado, estrangulado por el equipo de la aspirina, y expuesto. Ya en el primer minuto, Ter Stegen salvó un remate de Chicharito Hernández que bien pudo ser gol. Un aviso de lo que podría ocurrir si los catalanes no encontraban su sitio. Pasado el cuarto de hora, un disparo de Kampl se marchó rozando el poste. Los catalanes eran un flan y ya se escuchaba un murmullo en el Camp Nou.

El gol visitante llegó a balón parado, justo donde el Barça de Luis Enrique y Juan Carlos Unzué más había mejorado desde el curso pasado. El turco Çalhanoglu puso una rosca tensa y el griego Papadopoulos remató ante la pasividad de Ter Stegen y de Mathieu. La discusión inmediatamente posterior al gol entre Luis Suárez y el portero alemán, evidenció que algo funcionaba mal. Pudo ser mucho peor para el Barça, de no ser porque Ter Stegen sacó una mano prodigiosa para desviar un disparo a bocajarro de Bellarabi, quien se marchó de Piqué como facilidad pasmosa. Pese a su pobre imagen, la peor que se le recuerda, el campeón ya disfrutó de un par de buenas ocasiones en el primer tiempo. Leno, que compite con Ter Stegen por hacer sombra a Neuer en la 'Mannschaft', salvó primero un remate de Sandro, tras pared con el delantero uruguayo; y cerca del descanso el palo salvó el remate de Neymar y Papadopoulos el posterior remate del delantero grancanario.

Cambio de dibujo

Luis Enrique cambió el dibujo tras el descanso. Del 4-3-3 pasó a jugar con Sandro y Suárez en punta y Neymar de enganche. Obligó a adelantar su posición a los dos laterales, lo que aumentaba el riesgo de contragolpe en caso de pérdidas de balón. Se escuchaban ya pitos en el feudo azulgrana cuando Bellarabi asistió a Chicharito, quien lanzó a las nubes en posición inmejorable. Fue la última aproximación seria del Leverkuksen, que se fue cerrando y perdió capacidad para contraatacar cuando entró Kiessling por Chicharito. Un ariete más puro pero menos veloz y dinámico. dejó de amenazar y cavó su tumba.

Sandro desperdició dos buenas oportunidades, en las que remató demasiado cruzado, y dejó su lugar a Munir. Fue minutos después de que Iniesta sintiera un dolor en la parte posterior del muslo y pidiera el cambio. El peor mazazo para el Barça, que, sin embargo, protagonizó una reacción de campeón. Creció econ Jordi Alba, Munir y Sergi Roberto, tuvo fe y encontró premio cuando sus hinchas se temían ya lo peor. Sergi Roberto aprovechó el único error de Leno para meter la punterita y marcar a puerta vacía el gol del empate. Sin Messi y con Neymar flojísimo y teatral toda la noche -se llevó una amarilla por fingir un penalti-, tenía que aparecer Suárez. Cuando aún se festejaba el gol de Sergi Roberto, el 'Pistolero' descerrajó un disparo terrible para Leno.

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