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Casillas entrena junto a De Gea.
Iker Casillas asume su nuevo rol

Iker Casillas asume su nuevo rol

Del Bosque y sus compañeros destacan la actitud del capitán, que como sucediera con Xavi en Brasil se enteró de su suplencia justo al conocer la alineación

Rodrigo Errasti Mendiguren

Viernes, 17 de junio 2016, 00:31

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Iker Casillas, tras meses de dudas y debates, conoció sólo dos horas antes del debut ante la República Checa que no sería titular con la selección en su quinta Eurocopa. La titularidad de David de Gea no fue una gran sorpresa para él, ya que había recibido muchas señales desde hace tiempo, pero la realidad es que lo supo en el mismo momento que el resto de sus compañeros: cuando el cuerpo técnico anunció la alineación titular antes de partir hacia el estadio. «Para mí, que Iker no juegue también es un dolor. Sé que es un jugador al que hay que respetar mucho. Pero cuando tengo la duda, intento elegir al mejor, al que pensamos que es mejor. Muchas veces son opiniones», dijo Vicente del Bosque en Mediaset. Así, pese a sus 167 partidos internacionales y ser considerado una leyenda vivió la misma situación que su amigo Xavi Hernández dos años atrás. «Creo que es obligación nuestra guardar la discreción hasta el último momento. No era un juego que mantuviera porque me gustara. También me lo preguntaron mis hijos y no lo sabían», aseguró Del Bosque.

En Brasil, después del 1-5 ante Holanda, hubo dos cambios en el once: el genio de Terrasa y Piqué se caían de la alineación. Nadie les anunció su suplencia pese a su peso en el equipo. Quizá por esa razón, no hubo deferencia con el mostoleño. «Hoy he hablado con él un momento porque me sabía mal ser tan seco. Ha reaccionado con toda normalidad. Son muchos años los que llevamos juntos. En el debe mío tengo muchas cosas con Iker, pero también algo en el haber. No tengo por qué mostrarme severo con él porque no, pero tampoco demasiado entregado. ¿Cariñoso? Igual, tranquilo y sereno. Muy comprensivo», aclaró el seleccionador el miércoles. Y no es una declaración de cara a la galería, ya que Casillas, según se explica desde dentro de la expedición, lo encajó de modo espectacular.

Posible premio ante Croacia

Del Bosque tenía claro que De Gea, viendo su espectacular momento de forma en el Manchester United, debía ser titular. Por eso le quiso probar ante rivales de primer nivel después del Mundial (Francia, Holanda e Italia porque una lesión ante Alemania y la suspensión ante Bélgica le impidieron completar su plan) y tras el fallo de Casillas en Zilina frente a Eslovaquia, que supuso la última derrota en partido oficial de 'La Roja'. Después asumió que Casillas iba a ayudar desde el banquillo, algo que deslizó en público tras las fechas navideñas.

Antes de la citación de marzo charló con el guardameta del Oporto, que le confirmó que, si el salmantino lo consideraba oportuno, no tendría problema en acudir a Francia pero no ser titular. «Le he visto bien en el banquillo y eso me gusta. Cuando ves a doce jugadores parados no te gusta, quieres que vivan el partido y que sientan el éxito de los que están en el campo, porque muchos son necesarios. Quiero vivir esto con la mayor normalidad posible, necesitamos gestionarlo y no queda otro remedio. Hay que ser profesionales y entenderlo, no puedo estar disculpándome porque no juega. Tenemos un portero con cientos de internacionalidades, no es un tema menor, pero nos ha tocado», insistía el seleccionador. Es por ello que el cuerpo técnico incluso duda si dar unos minutos a Casillas ante Croacia si la clasificación está lograda, aunque en cualquier caso parece complicado que no haya nada en juego porque es previsible que el rival siempre llegue con opciones de adelantar a España.

Sus compañeros en la selección, que valoran mucho su implicación y actitud estos días en la concentración, también intuyen que ese premio podría llegar, aunque ello podría volver a avivar un debate que algunos querían reabrir en la misma sala de prensa de Toulouse, minutos después de que hubiese terminado el primer partido. «Ahora estamos aquí para analizar el partido que se acaba de jugar», dijo Del Bosque con cierto hartazgo tras el triunfo del lunes, en el que el mostoleño vibró como el que más y celebró el 1-0 de Piqué, al que después abrazó de modo efusivo sobre el césped. Lo mismo hizo con su rival, un De Gea que realizó una parada clave en la prolongación a Darida que hizo posible el triunfo. «Después de tantos años es raro, pero De Gea ha hecho una gran temporada y nos viene bien», explicó Ramos.

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