A las puertas de la victoria

El equipo local, con un total de 17 asistencias, fue el que llevó en líneas generales el peso, el ritmo y la iniciativa del partido, jugando más en equipo que un equipo cacereño que, si bien es cierto que estuvo a punto de ganar, lo basó todo en acciones individuales más que en las colectivas.

El encuentro comenzó de cara para las locales, ya que en los cinco primeros minutos le endosaron un parcial de 10-0 a las extremeñas, reflejando el electrónico un 15-4. El técnico visitante, Jacinto Carbajal, cortó esta dinámica con un tiempo muerto. La intensa actividad defensiva de las locales anulaba por completo el juego de las cacereñas, quienes a su vez no podían defender las embestidas locales en condiciones favorables. Se rozó la máxima ventaja dos veces (+11) en este cuarto, cerrando el primer cuarto con un 21-12 que hacía sospechar que el encuentro podía ser un paseo.

Tras un intercambio de canastas que dieron lustre al partido y animaron a los presentes, se vio un cambio defensivo drástico de las visitantes, que en este segundo cuarto cambiaron a una zona 2-3, pero aún así las jugadoras de Chiqui Barros lograron la máxima ventaja en el minuto 16 cuando el electrónico reflejaba una renta de 13, 34-21.

A partir de ahí las cacereñas subieron líneas en defensa y llegaron a recortar las diferencias hasta los cinco puntos gracias a un parcial de 0-8, pasando al 34-29 a escasos segundos del final del cuarto. En tres minutos, el Al-Qazeres había anulado el ataque local gracias a que se lograron quitar complejos y se animaron en las labores defensivas, algo a lo que también ayudó los fallos en canastas fáciles del Pajariel Bembibre, llegando al descanso 36-29.

Tras la vuelta de vestuarios, el equipo cacereño continuó con la zona, ajustándola aún más, lo que provocó continuos acercamientos al marcador. El partido se realentizó. Así, en casi una docena de ocasiones las jugadoras visitantes anotaban sobre la bocina.

En el último cuarto, OReilly daba oxígeno a las suyas con un triple ante la pegajosa zona visitante, llegando otra vez a los once puntos de diferencia cuando marcaba el electrónico un 55-44 en el minuto 31, cortando otra vez el juego con un tiempo muerto visitante.

Un intercambio de canastas entre ambos conjuntos favoreció otra vez al conjunto cacereño, que gracias a un posterior 0-11 logró igualar a tres minutos para el final del encuentro con una canasta de Vilaro, respondida inmediatamente con un triple de Ana Gómez.

Ante la posibilidad de conseguir la victoria, Carbajal volvió a solicitar un tiempo muerto. Después de una serie de jugadas afortunadas y desafortunadas para ambos equipos, a seis segundos Fatou Dieng logró otro triple que dejó la diferencia en un punto a 40 segundos del final, 63-62.

Sin bonus en las faltas personales de las locales, Ana Gómez cometió la quinta faltando seis segundos para el final. En la jugada siguiente, Jennifer recibió el balón de saque de banda y tras una serie de carambolas, el balón cayó en manos de Gilbert, que lanzó un triple a la desesperada que no tocó ni el aro. Ahí se esfumaron todas las posibilidades del conjunto que continuará ocupando la última posición de la tabla clasificatoria.