El escándalo llevaba casi una semana sin resolverse. Tras su retorno a la casa de Guadalix, Carlota Prado confirmó lo que muchos sospechaban: «Se dio un hecho grave y desagradable contra mi persona estando yo inconsciente. Muy a mi pesar estoy de acuerdo con la decisión de la organización». La joven de 24 años volvió a la casa de 'Gran Hermano Revolution' la tarde del miércoles tras pasar unos días fuera de forma cautelar. El canal 24 horas cortó entonces la emisión y ha reservado las imágenes de su vuelta hasta la noche del jueves.
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El motivo de su ausencia, los hechos acaecidos durante una fiesta en la casa la madrugada del sábado. Aquella noche, la organización del 'reality' dio aviso a la Guardia Civil de un posible delito de abuso sexual. Carlota «se encontraba bastante bebida» y su pareja, José María López, también concursante, la llevó a la cama y «se tapó a sí mismo y a la mujer con un edredón», según explicó en el cuartel de Colmenar Viejo el director de Contenido del programa. Los técnicos «no pudieron llegar a ver lo que sucedía con exactitud bajo el mismo», pero se procedió a la expulsión de José María y a la salida temporal de Carlota.
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